‘La Razón’ es el único periódico generalista nacional que hasta la fecha no ha llevado a cabo despidos colectivos. ‘El País’, ‘El Mundo’ y ‘ABC’, en cambio, han ejecutado expediente de regulación de empleo que han diezmado sus redacciones. Desde mediados de 2008 hasta octubre de 2012, se han visto afectados 6.393 empleos periodísticos en España, no solo de periodistas, sino de trabajadores del sector en general, según el ‘Informe Anual de la Profesión Periodística’ que edita la Asociación de la Prensa de Madrid.
Fuentes internas de ‘La Razón’ aseguran que la dirección del medio de comunicación ha informado a los representantes de los trabajadores que es necesario llevar a cabo un ajuste de cara a un año 2013 en el que se prevé que los ingresos publicitarios sigan cayendo. Estas mismas fuentes ponen de manifiesto que por ahora se trata de un primer contacto y que la intención es llegar a un acuerdo en los primeros días del año para optimizarlas.
Aunque todavía se trata de conversaciones preliminares, la empresa busca una rebaja de su masa salarial, una cuestión que se lograría mediante una reducción porcentual pactada de los salarios de manera temporal. Fuentes del sector, por otro lado, explican que entre las medidas puestas sobre la mesa están la desaparición de alguna de las ediciones, así como la centralización en Barcelona de alguno de los servicios comunes.
Desde el inicio de la crisis, la editora de ‘La Razón’ ha sufrido bajas puntuales, entre otras, dos despidos y ocho bajas incentivadas que fueron pactadas con los trabajadores que conforman una plantilla cercana a los 200 profesionales entre fijos y colaboradores.
Mercado publicitario en regresión
La difusión del rotativo hasta septiembre cayó hasta los 76.000 ejemplares, una cifra que supone un 13% menos respecto a un año antes, según los datos recopilados por Deloitte para la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE). La venta de ejemplares y suscripciones individuales se rebajaron en un porcentaje similar hasta los 50.000 ejemplares. En el mismo período, la facturación publicitaria neta de la edición de papel mermó por encima del 15% mientras que la de la digital un 17%.