“Estas muertes nos obligarán a redoblar nuestros esfuerzos y trabajo”. Con esta frase, la redacción de la revista Mongolia ha querido dejar clara su voluntad de perseverar en su actitud crítica e incorrecta, tras el atentado terrorista perpetrado contra el medio satírico francés Charlie Hebdo. En esta publicación, inciden en que la burla inteligente sobre determinados asuntos escuece, lo que, en su caso, les ha hecho objeto de diversas amenazas de extremistas religiosos de confesiones como la islamista. Algunas de estas coacciones ya han sido trasladadas a los tribunales.
Desde la redacción de este medio de comunicación, han asegurado a Vozpópuli que las amenazas son frecuentes en el mundo de la prensa satírica, como bien saben sus responsables por su experiencia en ésta y otras publicaciones de la misma índole. Estos intentos de intimidación suelen emanar de individuos o grupos que han llevado algún dogma hasta el extremo y son incapaces de asimilar cualquier crítica. En su caso, les han intentado coaccionar por sus contenidos sobre el islamismo radical, si bien apuntan a que la mayoría de estos avisos proceden de “grupos ultracatólicos”.
La propia Charlie Hebdo había sido advertida en reiteradas ocasiones sobre las viñetas que había difundido sobre el yihadismo. Es más, su director, 'Charb', fallecido en el brutal atentado, disponía de escolta policial y ya había tenido que hacer frente a ataques como el incendio intencionado que sufrió la sede de la revista en 2011.
En solidaridad con los fallecidos, en Mongolia han subido a su web dos páginas de la edición 1.176 de este medio impreso francés, que llevan el título “Votre ado devient-il djihadiste?” (“¿Vuestro adolescente se convertirá en un yihadista”). Al pie de estas viñetas, han incluido un comunicado en el que aseveran que Mongolia estará “siempre” con los perseguidos. “Hoy esos son los caricaturistas y periodistas que se atreven a cuestionar una visión ilegítima e inmoral de una determinada religión”, precisan en el texto, en el que declaran que “ningún acto terrorista” les va a hacer renunciar a su fe en la libertad de expresión.
Homenajes desde la prensa satírica
La otra gran publicación satírica española, El Jueves, también ha expresado su repudia ante los asesinatos en Francia, aunque de una forma más taimada, pues lo ha hecho con una viñeta en la que se observa un tintero volcado del que brota un hilo de sangre, el cual está situado bajo las palabras “malos tiempos para el humor”. En su cuenta de la red social Twitter, ha difundido un escueto mensaje de solidaridad con los trabajadores de Charlie Hebdo.
Mongolia ha reproducido en su web unas viñetas publicadas en el número 1.176 de Charlie Hebdo, en las que se caricaturizaba el yihadismo
Fuentes de esta publicación, consultadas por este periódico, han descartado haber recibido amenazas por sus historietas de crítica al islamismo radical. Es decir, sin levantar mucha polvareda, han tratado de salir al paso de un asunto sobre el que se han pronunciado de forma bastante prudente en otras ocasiones, como en 2006, cuando El Jueves expresó su apoyo al diario danés Jyllands-Posten -por la publicación de las famosas viñetas de Mahoma- con una portada que incluía el titular "Íbamos a dibujar a Mahoma...¡pero nos hemos cagao!".
Humor y crítica ha aplicado El Mundo Today para referirse a este asunto, al publicar en su web una noticia titulada “Alá es la polla”, firmada bajo el pseudónimo “No disparen” y que incluye frases como la siguiente: “Alá podría ser “grande” o incluso “muy grande”. Tal y como ha podido saber El Mundo Today, Alá es el puto amo, por lo que más vale que nos callemos la puta boca. Alá es tan bueno que se te caen los cojones al suelo de lo bueno que es”.
Desalojo de las dependencias de varios medios de comunicación
Unas horas después del atentado, sobre las 15.00, ha sido desalojado el edificio del Grupo Prisa, sito en la calle madrileña de Miguel Yuste. Según informa Europa Press, su personal de seguridad habría detectado un paquete sospechoso que, ante el temor de que pudiera contener material peligroso, ha sido analizado por la Policía, que ha confirmado la “falsa alarma”. Este hecho ha paralizado la actividad durante aproximadamente una hora y media en El País, el Huffington Post, el diario As y Cinco Días, entre otros.
Las falsas alarmas de bomba han saltado en las redacciones de varios medios de comunicación de Madrid
Objetos de estas características se han detectado también Libertad Digital, 20 Minutos y El Economista, lo que ha obligado a presenciarse a agentes policiales. En todos los casos, se ha descartado que esos paquetes supusieran riesgo alguno.
Estos episodios son fruto del temor que ha desatado el ataque perpetrado por los supuestos yihadistas que, a punta de fusil, han tomado este miércoles por la mañana la redacción de Charlie Hebdo y han perpetrado una cruel matanza. "Ante esto, repetimos, la receta es libertad de expresión. No contemplamos otra opción", manifiestan a Vozpópuli desde la revista Mongolia.