Hay una anécdota que deja clara la distancia que separa a Rosa María Mateo de Xabier Fortes. Sucedió el pasado verano, durante la visita de Pedro Sánchez a Los Desayunos de TVE para ser entrevistado. Ese día, el periodista se acercó a saludar a la administradora única de la radio-televisión pública, pero Mateo rechazó esa muestra de cordialidad con un mal gesto.
La confianza entre ambas partes se rompió hace algo más de un año, después de que Mateo propusiera cambiar de fecha el debate electoral cuya celebración estaba prevista en La 1. Lo hizo para hacer coincidir la cita con la que estaba programada en Atresmedia. El motivo es que el PSOE quería que Pedro Sánchez sólo debatiera un día, y no dos, de ahí que la administradora única de RTVE tomara esa determinación, favorable a los intereses de Moncloa.
Entonces, Begoña Alegría, exjefa de Informativos de TVE, se descolgó de esa decisión, que era partidista y que finalmente no cuajó. Xabier Fortes -moderador del debate- la apoyó, lo que sembró la desconfianza de Rosa María Mateo con estos periodistas y abrió una grieta entre las partes. Alegría dimitió de su cargo hace unos meses y este lunes Fortes ha sido destituido de su puesto de presentador de Los Desayunos.
Fuentes de Torrespaña explican que la decisión se la ha comunicado el propio Enric Hernández, director de los Servicios Informativos en funciones y quien se encarga estos días de la reestructuración la franja matinal de La 1.
El motivo aducido no es de audiencia, dado que el programa presentado por Fortes superaba en cuatro puntos la media de la cadena, sino en la necesidad de renovar las mañanas del canal generalista de TVE para tratar de acercar sus resultados a los de la competencia, que son superiores.
De hecho, la idea inicial es que el espacio de actualidad matinal se extienda desde primera hora hasta media mañana, al igual que hacen Antena 3 y Telecinco con Espejo Público y El Programa de Ana Rosa. Las previsiones pasan por realizarlo en Prado del Rey, con Mónica López al frente.
Aguas revueltas
Ahora bien, en Torrespaña ha llamado la atención la caída de todos los presentadores de su franja matinal. O, al menos, de dos de los tres, dado que el caso de Máximo Huerta es más fácil de explicar, dado que su magacín A partir de hoy registraba una audiencia muy inferior a la media de la cadena y aún más que la de la competencia.
Pero los casos de Fortes y María Casado son distintos. A la expresentadora de La Mañana de La 1 -con una audiencia aceptable durante el estado de alarma- se le comunicó hace menos de 15 días que no seguiría en su puesto durante la próxima temporada. Sin embargo, su despedida se produjo antes de tiempo, a finales de la semana pasada, después de que solicitara una excedencia.
Casado es la presidenta de la Academia de TV y el pasado noviembre se enfrentó a una situación compleja con motivo de la organización del principal debate electoral.
RTVE quería organizar la cita, pero las televisiones privadas apostaban por la Academia. Casado no se posicionó internamente, ante el conflicto de interés que se le presentó. Sin embargo, el día del debate ejerció un papel institucional en la Academia y recibió y acompañó a los invitados, lo que no sentó nada bien en los altos despachos de la corporación.
A su cese se le ha querido atribuir una motivación política -explican fuentes del programa-, pero en realidad se debe al intento de cambiar de rumbo la franja matinal de La 1 y al empeoramiento de su posición dentro de TVE.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta que Casado fue designada para sustituir a Ana Pastor, primero, en Los Desayunos; y a Mariló Montero, segundo, en La Mañana. En ambos casos, por un equipo directivo diferente.
Mala sintonía
El caso de Fortes también ha sorprendido, pues ni siquiera le han ofrecido un nuevo espacio dentro de La 1, dado que su nuevo destino estará en las noches del Canal 24 Horas. Esto significa que quien ha sido uno de los rostros más representativos de la actual etapa en TVE pasará de conducir el principal programa de sus mañanas a un canal con una audiencia residual.
Todo ello sucede en un momento en el que el Consejo de Informativos -al que estuvo adscrito Fortes- ha sembrado las dudas sobre la gestión de Enric Hernández al frente de los telediarios. Entre otras cosas, le ha acusado de estar ausente de Torrespaña durante toda la crisis del coronavirus, así como de tomar decisiones tan cuestionables como emitir las ruedas de prensa en directo. Eso, entre otras cosas, ha concedido decenas de horas de espacio en TVE a los técnicos y ministros durante el estado de alarma.
Conviene tener presente que Hernández llegó a la corporación el pasado septiembre como director de Información y Actualidad; y que asumió la jefatura de los telediarios en funciones tras la dimisión de Begoña Alegría. Su nombramiento fue rechazado por la mayoría de los trabajadores en un referéndum consultivo que organizó el Consejo de Informativos.
Fuentes de Torrespaña inciden en que tras la dimisión de Begoña Alegría y la reprimenda pública que Fortes realizó a Rosa María Mateo el pasado abril, su destitución no era difícil de prever.
