El Grupo Unidad Editorial –que edita El Mundo, Marca, Expansión, Telva y otras revistas- continúa su política de ajustes con el objetivo reducir su masa salarial en unos 20 millones de euros en tres años. La penúltima medida puesta sobre la mesa, en este sentido, es una rebaja en el sueldo de sus directivos de en torno a un 12 por ciento, cifra correspondiente a dos (extras) de las dieciséis pagas que reciben.
El ajuste afectará a una treintena de altos cargos entre ejecutivos, directores y primeros espadas de las redacciones de los medios del holding de medios. Este recorte, no obstante, todavía no ha sido aprobado, tal y como hacen hincapié fuentes de la compañía surgida tras la fusión por absorción de Recoletos por parte de Unedisa en 2007.
Desde febrero se sabe que el sueldo de los directivos se vería reducido. El presidente de la matriz de Unidad Editoril (RCS), Provasoli Angelo, el director general Pietro Scott y sus colaboradores más cercanos sufrirán una reducción salarial del 10%, según se explicó a los representantes de los trabajadores en una reunión de los comités de la matriz italiana. Durante la presentación del plan apleó a la necesidad de "responsabilidad y de sacrificios" que la empresa pretende llevar adelante "de manera urgente", y anunció que "he decidido recortar mi sueldo un 10% desde ahora mismo. Es un gesto, un ejemplo que confío en que sigan todos mis compañeros directivos como ya les he pedido", mantuvo Scott.
Este ajuste se presenta como paso previo a volver a meter tijera en la masa salarial bajo convenio. El pasado 25 de abril, la empresa reunió a todos los comités y delegados de personal, les planteó la necesidad de ahorrar 20 millones de euros en costes salariales en tres años y les pidió constituir una comisión para negociar. Pero antes de facilitarles información, como condición previa a constituir esa comisión negociadora, Unidad Editorial inició un proceso de despidos individuales en las delegaciones, sin informar previamente a los representantes legales de la plantilla y negándose a negociar otras medidas de ahorro alternativas, lo que se traducirá en una importante merma de la calidad del periódico, en opinión de los trabajadores, según denunció la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP).
Fuentes de Unidad Editorial explican que todavía no se ha abordado el asunto en profundidad y que las conversaciones entre empresa y representantes sindicales están en una fase preliminar. En total, entre los ERE de 2009 y 2012, la plantilla del Grupo Unidad Editorial se ha reducido en los cinco últimos años en unos 600 trabajadores, hasta quedar en la actualidad en una cifra en torno a 1.600 profesionales.
Números rojos
El grupo editorial italiano Rizzoli-Corriere della Sera (RCS) registró en el primer trimestre del año pérdidas netas de 107,1 millones de euros, casi 4 veces más que los 27,3 millones de euros que perdió en el mismo periodo de 2012. A este montante de números rojos, su filial española aportó un ebitda negativo de 12,1 millones, una cifra más de cinco veces superior a los -2,3 apuntados un año atrás. Los ingresos publicitarios Unidad Editorial fueron de 32,4 millones de euros, lejos de los 41,8 del primer trimestre de 2012. Sus ingresos editoriales alcanzaron los 48,5 millones frente a los 54,5 de un año antes.
