Los dueños de Unidad Editorial, el grupo italiano Rizzoli-Corriere della Sera (RCS), se han visto obligados a prorrogar hasta febrero-marzo el plazo para la aprobación del plan de negocio para el período 2013-2015, el cual incluye una ampliación de apoyarlo de más de 400 millones de euros.
Entre las razones de este contratiempo se encuentran la falta de una solución a las dificultades que pasa su filial en España, la cual desde hace meses promueve fusiones en el sector nacional, tal y como ponen de manifiesto fuentes del sector. Fuentes del sector en Italia añade que el retraso se deba además a que los accionistas siguen sin ponerse de acuerdo sobre la cuantía sobre la que incrementar el capital social.
La matriz italiana propietaria de los diarios ‘El Mundo’, ‘Expansión’ y ‘Marca’ había fijado el 31 de diciembre como fecha tope para cerrar una operación corporativa. Fuentes del sector aseguran que Antonio Fernández-Galiano, CEO de la filial española, y a Borja Prado, hombre de Mediobanca en España, promueven sin éxito una fusión al cien por cien con el grupo multimedia Vocento. El objetivo de una operación de este calibre sería crear “un gran grupo de centro derecha con prensa líder de información regional, nacional, económica y deportiva”, en referencia a los 12 diarios locales de Vocento, a ‘ABC’ con ‘El Mundo’, a ‘Marca’ y a ‘Expansión’, explicó recientemente una fuente de Unidad Editorial a Vozpópuli.
RCS dará a conocer este miércoles las directrices del Plan 2013-2015, pero sólo los objetivos financieros y de negocios. Será aprobado en su totalidad, según los medios especializados italianos junto a la presentación de los resultados 2012 en dos o tres meses.
Hace meses el mercado italiano tasó en unos 400 millones de euros la ampliación de capital que debería llevar a cabo RCS, una cantidad similar a la actual capitalización de la empresa. Unidad Editorial amplió en abril capital por valor de 500 millones de euros, mediante la emisión de nuevas acciones. El grupo que preside Antonio Fernández Galiano acumulaba 330,8 millones de pérdidas en 2011, una cifra que puso al grupo español al borde de la quiebra y obligó a RCS –que controla el 96% de su accionariado- a inyectar capital para rescatarlo.
"El gran problema es la cantidad de recapitalización. Rcs La necesidad es más hacia los 800 millones que el 400 y muchos miembros se muestran reacios a sus desembolso o simplemente no los tiene”, aseguró este martes una fuente cercana a la situación a Reuters. La necesidad de apoyar el plan a ser alrededor de 700-800 millones también fue confirmada por una segunda fuente, quien dijo: "el anuncio está pendiente de una serie de cosas, los acuerdos en España y la puesta en valor de los inmuebles de Milán”, apuntó otra fuente a la citada agencia de noticias.