Todavía poco conocido en España, el empresario Wang Jianlin es uno de los millonarios más relevantes de China. El nuevo propietario del 20% del Atlético de Madrid y del Edificio España es el tercer hombre más rico de su país y tanto él como su familia son personajes muy populares. Sobre todo su hijo Sicong: con 27 años es extrovertido, deslenguado y tan, tan rico –también forma parte del consejo de Wanda, el grupo familiar– que hace lo que le viene en gana... y eso, en un país cuyo régimen trata de proyectar una imagen de austeridad y recato, no es bendecido por los medios oficiales.
Wang Sicong lo ha vuelto a comprobar esta semana, después de las declaraciones que realizó en un evento benéfico de San Valentín –celebrado, por supuesto, en uno de los teatros del grupo de empresas de su famlia– en el que 100 de sus fans habían pujado para poder estar junto a él. Allí, durante una entrevista, afirmó que el requisito imprescindible para él en una chica es que tenga “unas tetas grandes”, de acuerdo con Forbes. A partir de entonces comenzó una sucesión de críticas en los medios oficiales y respuestas en redes sociales del conocido como marido nacional (la misma publicación estima la fortuna de su padre en 11.500 millones de euros) que se ha extendido durante esta semana.
https://twitter.com/zhengzhouxinwen/status/566927930920828928
¿Igual que Silvio Berlusconi?
Las palabras de Sicong centraron un primer comentario publicado por la agencia estatal Xinhua donde se le señalaba de forma velada al denunciar a ciertos personajes famosos, como “el hijo de un tycoon”, que “difunden de un modo imprudente información vulgar que va de la adoración del dinero al sexo y la violencia”, según informa Business Insider. El texto de Xinhua le acusaba de cosificar a las mujeres y de que sus palabras nacían de la arrogancia por su riqueza. También comparaba su actitud hacia el sexo femenino con la del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, según informa el South China Morning Post (SCMP).
En otra ocasión, Sicong dijo: “Hablo como me da la gana porque soy el más rico, ¿y qué?”.
El propio Sicong, muy popular en las redes sociales chinas como weibo, compartió el mensaje con su medio millón de seguidores sin hacer más comentarios, aunque poco antes había subido otro post asegurando estar sorprendido por unas palabras que según él no eran más que una broma del día de San Valentín. Su descaro generó la simpatía del público, que criticó el tono rotundo de la nota de Xinhua.
Tras la crítica reacción de los internautas, la agencia estatal se reafirmó en su discurso con un segundo artículo titulado Hijo del millonario, estás cometiendo un error en el que se analiza más a fondo el que, para Xinhua, es un “chiste sin gracia que cosifica a las mujeres”. De acuerdo con el SCMP, el texto de la agencia indicaba que como el famoso influyente que es, debe recordar que hay ciertas bromas que no debe hacer, aunque destaca que las palabras de Sicong (estas últimas u otras, como cuando en otra ocasión dijo que habla como le da la gana “porque soy el más rico, ¿y qué?”) no le van a suponer un riesgo legal.