Mémesis

M, la historia del niño que no podrá ir a la universidad

El escritor Fernando José López comparte en sus redes una anécdota sobre un niño sin recursos pero muy aficionado a la lectura y la historia se viraliza. Las redes se polarizan entre los que acusan al dramaturgo de perderse en la ficción para ganar relevancia y los que ven un ejemplo perfecto de nuestra putrefacción social.

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Twitter es una plataforma ideal para esparcir maniqueísmos. La reflexión pausada y con perspectiva no cabe en una red donde irónicamente los tweets se volatilizan solo cuando no llevan dinamita. Hay que posicionarse en cualquier historia, cualquier hecho o acontecimiento que rezume ideología para no defraudar a tus imaginarios seguidores. No basta con disfrutar viendo los pájaros volar, hay que disparar a matar o indultar a los más bellos.

Esta falta de análisis pausado se ha vuelto a demostrar con una historia viral difundida por el novelista y dramaturgo Fernando José López. Una anécdota, sin más, ocurrida en la presentación de uno de sus libros que se ha viralizado en Facebook y Twitter al ritmo de retweets, halagos y reproches.

Esta es la historia. Lean:

Fuente original

La anécdota fue publicada primero en su Facebook —una red social de amistad bidireccional que la hace mucho más endogámica que Twitter— En Facebook tus seguidores son, por regla general, más cercanos: familia, amigos, lectores, etc....  Te conocen, te intuyen, te respetan. La historia allí tiene solo reacciones positivas… y es lo normal.

Pero cuando la historia llega a Twitter y se viraliza (ya lleva casi 4.000 retweets) empieza a generar una lluvia de reproches y vituperios. La maquinaria maniqueísta busca motivos para retroalimentarse y la aventura de M está llena de ellos.  M es una víctima del deterioro de nuestro sistema educativo. M de Moraleja por abandono institucional de los más desfavorecidos. M de Miedo al futuro de nuestros hijos.

Una anécdota personal no tiene por qué ser justa, ecuánime o del gusto de todos. Tampoco tiene bula para eludir las críticas. Todas legítimas cuando se hacen con criterio.

https://twitter.com/velardedaoiz/status/791905097014018048

Donde el argumentario pierde los papeles es en la puesta en entredicho de la veracidad de una historia para desmontar su moraleja. M de Mentira dicen algunos. Un Ad Hominem que busca siempre el desprestigio personal por falta de recursos argumentativos.

El escritor ha tenido que hacer unas puntualizaciones personales donde deja claro que no pretende convencer a nadie de la existencia o veracidad de la anécdota sino mostrar un problema a través de una historia personal. La realidad duele más que la ficción.

https://twitter.com/Nando_J/status/791929386681327616

No disparen al pájaro, ni tan siquiera le indulten con soberbia. Simplemente véanlo volar.

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