El mercado de vehículos eléctricos en España está experimentando este 2016 un notable crecimiento, casi un 80% respecto a 2015 que puede llevar este ejercicio a superar incluso las 4.000 matriculaciones de modelos cien por cien eléctricos. Sin embargo, la finalización del anterior Plan Movea ha llevado a una caída de las ventas en los dos últimos meses tras trece meses de crecimiento continuado. Un hecho que ha hecho saltar las alarmas entre los fabricantes que ven imprescindible la entrada en vigor de nuevos planes de ayudas para mantener ese crecimiento. Pero también la falta de infraestructuras supone un freno añadido al desarrollo de la movilidad eléctrica, un freno que llega lógicamente por parte de las administraciones públicas. Será por falta de presupuestos o porque el petróleo sigue moviendo demasiados intereses, pero la sensación es que la movilidad eléctrica podría sin duda evolucionar más deprisa… pero no lo hace.
Nissan, como marca líder de ventas en nuestro mercado de vehículos eléctricos, ha organizado la segunda edición del Foro de Movilidad Sostenible, un encuentro que nació el año pasado con el objetivo de debatir entorno a la sostenibilidad e impulsar el vehículo eléctrico en España. Esta edición, ha contado con la presencia de Miguel Angel Ruiz, Viceconsejero de Medio Ambiente, Administración Local y Ordenación del Territorio de la Comunidad Autónoma de Madrid; Francisco López Carmona, Director General de Gestión y Vigilancia de la Circulación del Ayuntamiento de Madrid; Alejandro Cros, Subdirector General de Políticas Sectoriales Industriales, Secretaría General de Industria y de la PYME del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
Marco Toro, Consejero Director General de Nissan Iberia, ha reconocido el esfuerzo de las administraciones y de las empresas que durante este año han decidido apostar por la movilidad eléctrica y ha resaltado la necesidad de aunar esfuerzos y agilizar los trámites legales al máximo, invirtiendo en más incentivos e infraestructura.
“Debemos dar respuesta a las crecientes necesidades de transporte de la sociedad de la manera más limpia y eficiente posible, porque el potencial de la movilidad eléctrica es inmenso” y ha añadido que “tan sólo triplicando el mercado de vehículos eléctricos, con unos 12.000 vehículos eléctricos, ya se podrían ahorrar 40 millones de toneladas de emisiones de CO2, 16 millones de litros de combustible y 18 millones de euros al año”. Además la introducción del vehículo eléctrico en la sociedad podría suponer para el usuario un ahorro anual entre 2.000€ y 4.500€ euros dependiendo del perfil del usuario y sus necesidades y uso real.
Un mercado del vehículo eléctrico más amplio podría suponer para España la oportunidad industrial para que el país atraiga nuevas inversiones. Además, se podría disponer de un parque automovilístico más joven, eficiente y, por lo tanto, más sostenible, sin olvidar los ahorros que suponen para el usuario.
Los pilares estratégicos del sector planteados por empresas públicas y privadas siguen siendo cuestiones imperativas para la incorporación definitiva de los vehículos 100% eléctricos en el parque español. Los dos más relevantes, más incentivos a la compra y al uso, el desarrollo y la ampliación de la infraestructura de carga en las ciudades y en los corredores. También la modificación del actual decreto sobre gestor de cargas, una mayor colaboración público-privada para la incorporación de vehículos 100% eléctricos en flotas de servicio y la divulgación y comunicación resultarían fundamentales para llegar a implantar de verdad la movilidad eléctrica.
