Finalmente ¡oh, que sorpresa! ni ERC, ni PNV, ni Bildu han presentado enmiendas a la totalidad al proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado para 2023. Pese a los amagos, advertencias o amenazas que en un gastado por reiterado dejà vu se han vuelto a escuchar estos días , los tres socios parlamentarios preferentes del Gobierno lo han vuelto a apoyar y el proyecto de ley no será devuelto al Consejo de Ministros, iniciándose así su correspondiente tramitación parlamentaria. Por supuesto, los juglares de la sanchezería han vendido el hecho como un nuevo éxito del sanchismo.
Lo cierto es que para lograr que los tres grupos políticos reseñados apoyen el Presupuesto, lo de menos es la orientación económica general que el proyecto pueda tener, su carácter expansivo o contractivo, las cifras fijadas para las diferentes partidas de gasto, las ratios de déficit y deuda que prevea … Tampoco es relevante si el escenario macroeconómico que lo cimenta es realista o es una quimera, si las incertidumbres existentes pueden poner riesgo su cumplimiento… No le demos más vueltas, todo eso da igual, lo único trascendente es el precio que cada uno de los socios del Gobierno pueda sacar por prestar su voto. Así ha sido hasta ahora y así será también este año.
El componente monetario incidirá en el trato de favor que Cataluña viene recibiendo en forma de inversión pública o en la profundización de privilegios fiscales
En las próximas semanas se abrirá el zoco de La Moncloa al que acudirán los independentistas catalanes, los nacionalistas vascos, y los herederos políticos del terrorismo etarra para que, en sucesivas sesiones de subasta, se vaya aproximando el precio que está dispuesto a pagar el comprador de votos con el que exigen sus vendedores o arrendadores. Y finalmente, los Presupuestos serán aprobados para mayor gloria del sanchismo, lo que resultará nuevamente evocado por el conjunto de la sanchezería y sus juglares.
Como en todos los negocios complejos, el precio también lo será, de manera que englobará una parte en dinero y otra en especie. El componente monetario incidirá en el trato de favor que Cataluña viene recibiendo en forma de inversión pública, o en la profundización de los privilegios fiscales que disfrutan las provincias vascongadas ¡ojo a lo que pueda pasar con el nuevo impuesto a las grandes fortunas! Pero, al final, el dinero es solo dinero y lo que hoy se da de más, mañana puede recibirse de menos. No, lo auténticamente grave, lo realmente dramático son los cheques en especie que Sánchez viene y seguirá pagando a cambio del apoyo parlamentario de sus socios preferentes: Ahora por los Presupuestos; antes y después, por acceder al Gobierno y por mantenerse en él.
Le queda por pagar la reforma ad hoc del Código Penal para rebajar las penas de sedición y dar un tratamiento laxo a las corrupciones cometidas por la cúpula del procés
En efecto, es auténticamente grave y realmente dramático que el Gobierno Sánchez haya indultado a unos condenados por delito de sedición que ni se han arrepentido de su acto delictivo ni han renunciado a la reincidencia. Como es auténticamente grave y realmente dramático que Sánchez haya dado su conformidad expresa al incumplimiento por parte del Gobierno catalán de la sentencia del Tribunal Supremo que obliga al 25% de enseñanza en español. Eso ya lo ha pagado el Gobierno Sánchez. Le queda por pagar la reforma ad hoc del Código Penal para rebajar las penas del delito de sedición y dar un tratamiento laxo a las corrupciones que, en el uso del gasto público, cometieron los dirigentes del procés. Veremos pagar ambos precios.
Claro que no son menores los pagos en especie cobrados por los partidos nacionalistas vascos. Por referirnos al más execrable de todos, basta mencionar la conjunción de: 1) Traslado de presos etarras al País Vasco; y 2) Traspaso de las competencias sobre prisiones al Gobierno Vasco. Como consecuencia de su conjunción, terroristas condenados por delitos de sangre que no han cumplido su condena, no se han arrepentido y no han colaborado en el esclarecimiento de los crímenes etarras, se pasean hoy libremente por las calles y pueblos de Vizcaya, Guipuzcoa y Álava.
Todo lo expuesto no existe en el mundo virtual que nos quiere vender la sanchezería, de manera que la próxima aprobación de los nuevos Presupuestos será otro éxito más de Sánchez que demostrará su auténtica valía como hombre de Estado. Y así lo cantarán sus juglares.
Karl
„En el supuesto de que el rey vejara a todo el reino con sus costumbres depravadas y su reinado degenerase en una manifiesta tiranía, ¿cómo podría la comunidad en que gobierna despojarlo del reino e incluso de la misma vida, si fuera necesario, si no hubiese retenido una potestad mayor que la que sus representantes delegaron en el rey?“ ~Juan de Mariana, †1624