El paso atrás del Gobierno en la creación del primer sindicato de trabajadoras sexuales de España ha generado una crisis en el seno socialista contra todo pronóstico. A punto de cumplir tres meses en el Ejecutivo, el presidente del gobierno con más mujeres ministras de Europa se ha visto obligado a salir del paso tras la polémica por el visto bueno en una resolución del BOE a la constitución de una organización que entiende la prostitución como un empleo.
"La prostitución no es legal en España y este Gobierno no dará respaldo a ninguna organización donde se recoja esa actividad ilícita", zanjó Sánchez desde América Latina. Sin embargo, aunque el Gobierno asegura que no ve "difícil" la anulación del nuevo sindicato -la Abogacía del Estado ya estaría estudiando posibles vías para hacerlo, como la nulidad de pleno derecho para revocar-, la Organización de Trabajadoras Sexuales (OTRAS), constituida el pasado 4 de agosto, cuenta cada vez con más apoyos.
El último capote llega de CCOO La mayor organización sindical en España ha manifestado su respeto al derecho fundamental a sindicarse, aunque reafirma su compromiso "contra la trata de personas". Según CCOO el objetivo del sindicato es y será la mejora de las condiciones laborales y de ciudadanía de trabajadoras y trabajadores, así como la defensa de los derechos humanos y específicamente de los derechos de las mujeres.
"Derecho a sindicarse"
"El pasado 4 de agosto el BOE publicó la constitución oficial del primer sindicato de trabajadores sexuales en España, denominada Organización de Trabajadoras Sexuales (OTRAS), asunto que ha creado, desde un inicio, controversia y discusión a todos los niveles. CCOO quiere manifestar que respeta, como ha hecho siempre, el derecho a sindicarse como un derecho fundamental recogido en el Capítulo 'Derechos y libertades. De los derechos fundamentales y de las libertades públicas' de la Constitución Española de
1978, tal y como se expresa en su artículo 28, siempre y cuando cumpla con todos y cada uno de los requisitos que para ello se exigen", ha señalado a través de un comunicado.
Si bien aseguran que deben reflexionar colectivamente sobre la situación legal y personal en la que se encuentran las miles de mujeres y hombres involucrados -y abogan por acabar con la explotación, la inseguridad, la vejación, el acoso y el maltrato que se esconde tras esa denominación de trabajadores sexuales- exigen empleo de calidad para todas las personas y alternativas laborales para quienes deseen abandonar la prostitución. "Asimismo nos reafirmamos en nuestro compromiso de lucha contra la trata de personas en cualquier sector económico en donde ésta pueda darse", insisten.
CCOO exige empleo de calidad para todas las personas y alternativas laborales para quienes deseen abandonar la prostitución"
Antes de que la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, quiso expresar su rechazo al sindicato la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que urgió al Gobierno a detener el intento de "legalizar la prostitución" con un sindicato de trabajadoras sexuales, una reacción que ha movilizado a la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA).
Desde APHDA aplauden la creación del sindicato, además de una sección sindical propia dentro de la Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC), porque entienden que se trata de "un movimiento imparable y de justicia por el que las propias trabajadoras sexuales reivindican sus derechos básicos y mejoran así sus condiciones de vida". La organización andaluza lamenta el debate generado y los discursos institucionales que se han originado tras la noticia de la constitución del sindicato, que no hacen más que confundir los términos. "No se trata de debatir si prostitución sí o no, estamos hablando de estar a favor de los derechos de este colectivo o condenarlo al abuso laboral, la exclusión y la clandestinidad", opinan.
Empresarios de clubes
En este sentido, denuncian que la patronal del trabajo sexual, los empresarios de clubes de alterne, estén organizados y reconocidos legalmente para preservar sus intereses y que se limite el derecho a organizarse en un sindicato a las trabajadoras sexuales, impidiéndoles así defender sus derechos.
Y cargan contra Díaz: "Recurre a la falacia que identifica prostitución con explotación, y aún más grave, con la trata de personas". Para la asociación es necesario "desvincular la prostitución de aspectos delictivos o penales en el abordaje intelectual, político y del imaginario social, dejar de hablar de la prostitución como una actividad ilícita o relacionarla directamente con la trata de personas".
Desde OTRAS, el sindicato de la polémica, han recordado que pese a no estar reconocida como relación laboral, la prostitución tampoco es ilegal. "El Gobierno debería dimitir en bloque, es increíble que no sepan qué es legal y qué ilegal en este país", dicen. La ahora secretaria general de la organización, Concha Borrell -también conocida como Paula VIP- acusa al PSOE de tener "odio visceral" hacia las trabajadoras sexuales y de defender un feminismo "blanco, heterosexual y burgués" que menosprecia sectores "empobrecidos" y "estigmatizados" como el de la prostitución.