El PSOE andaluz y su líder Juan Espadas se enfrentan el 19 de junio probablemente al reto más difícil en la historia de este partido: recuperar el poder. Después de más de tres años por primera vez en la oposición, Espadas intentará dar la vuelta a las encuestas, que están dando una victoria clara al candidato popular, Juanma Moreno.
El candidato socialista emprendió en 2021 un periplo que le ha llevado de la Alcaldía de Sevilla a ganar la primarias del PSOE a Susana Díaz, a convertirse en noviembre de ese año en secretario general, luego en senador por la comunidad, y a emprender una renovación en el partido con cuyos cuadros quiere ser presidente andaluz.
El PSOE-A y Espadas abordan, por primera vez, el reto electoral sin el paraguas y poder que da la Junta, en la oposición y frente a un candidato del PP consolidado y al que las encuestas empujan con viento de cola. Los sondeos atribuyen al PSOE-A un resultado parecido al de 2018 (33 diputados de los 109 de la Cámara autonómica).
Desde que tomó las riendas del partido y el control del grupo parlamentario el dirigente sevillano ha puesto de manifiesto su tendencia a los pactos y ha ofrecido a Moreno acuerdos en sanidad, educación, dependencia o sobre el último presupuesto de la Junta. Ninguno llego a buen puerto por la falta de entendimiento.
El objetivo era, además, aislar de los acuerdos a Vox, pero el diálogo no funcionó, de lo que se acusaron ambas partes.
A partir de entonces, Espadas ha endurecido sus mensajes y la posición de su partido contra el Gobierno andaluz, lo que le ha llevado a participar en distintas manifestaciones. Especialmente por la gestión sanitaria de la pandemia, aunque también ha pedido una comisión de investigación sobre los contratos sanitarios de la Junta, frenada por la derecha, o se ha personado en el denominado caso Maletines de la Junta que investiga la justicia.
Para estas elecciones el candidato del PSOE-A, de Pedro Sánchez y de Ferraz cuenta con el potente apoyo del aparato del partido, que le ha pedido que "despierte" a los socialistas andaluces.
El PSOE federal se la juega en una comunidad que puede aportar mucho a Sánchez en las próximas elecciones generales, en las que se eligen 61 diputados y 32 senadores.
La clave -asegura Espadas- está en la movilización de los alcaldes, concejales y militantes y que estos movilicen el voto progresista y de centro para dar la vuelta a unas encuestas, que apuntan a un estancamiento electoral.
El PSOE federal se la juega en una comunidad que puede aportar mucho a Sánchez en las próximas elecciones generales, en las que se eligen 61 diputados y 32 senadores, más en un momento en el que el Gobierno de Pedro Sánchez vive el momento más delicado de su mandato por la relación con sus socios parlamentarios.
"Si la militancia vota por el cambio, está claro que el PSOE va a volver a gobernar en Andalucía. Esa es mi ilusión y por eso estoy trabajando", sostiene el aspirante, que está convencido de que era necesario "cambiar al partido para gobernar" y recuperar el Palacio de San Telmo.
Carrera de Juan Espadas
Juan Espadas (Sevilla, 1966) es abogado y fue alcalde de Sevilla entre junio de 2015 y enero de 2022. Comenzó su carrera política en la Junta de Andalucía, donde fue viceconsejero de Medio Ambiente, ocupó el cargo de Consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio de 2008 a 2010 y fue presidente de la Empresa Pública del Suelo de Andalucía antes de dedicarse a la política municipal.
En 1990 empezó a colaborar con el PSOE como simpatizante en el grupo sectorial de Medio Ambiente y participó en los grupos de expertos para la redacción del programa del partido a las elecciones autonómicas. Un año después elaboró el Manual del Concejal de Medio Ambiente para las municipales de 1991.
En 1997 se afilió al PSOE y fue nombrado Coordinador Federal de Medio Ambiente, responsabilidad que ha ocupado hasta 2009, una etapa en la que trabajó con los equipos de Joaquín Almunia y José Luis Rodríguez Zapatero coordinando las políticas sectoriales de medio ambiente y ordenación del territorio.
Vayatoalla
Dicen que los discursos se les escribe su mujer en guorperfe.