El exdiputado de Ciudadanos por Asturias hasta el 10-N, Ignacio Prendes, abandona la primera línea política para regresar a su despacho de abogados. "He decidido retomar mi vida profesional y dar un paso atrás. Y cuando tomas esa decisión no hay caminos intermedios", anuncia a Vozpópuli.
Prendes (Gijón, 1965) fue destituido por sorpresa en enero por la Gestora naranja como portavoz del comité autonómico en Asturias. Junto a la también purgada Orlena de Miguel, eran los últimos críticos en cargos orgánicos de Ciudadanos a escasos dos meses de la Asamblea General del 15 de marzo.
En las últimas semanas ha participado en reuniones del llamado sector crítico que lidera Francisco Igea, pero finalmente su nombre no fue incluido en la lista de 31 nombres para las primarias contra el equipo de Inés Arrimadas. "En todo caso Paco (Igea) y su candidatura tienen todo mi apoyo y aprecio, ahora ya como militante de base. Ojalá gane", asegura a este periódico.
Su paso por UPyD
El ya exdirigente de Cs regresa al bufete gijonense de Iglesias y Prendes Abogados, en el que estuvo casi 20 años antes de su entrada en política en 2008 de la mano de Unión Progreso y Democracia (UPyD). Un año después fue el responsable de la ponencia de Organización y Estatutos aprobada en el I Congreso del partido magenta.
Prendes fue elegido diputado por Asturias en 2012 y estuvo en la cúpula de UPyD hasta diciembre de 2014, momento en el que dimitió por falta de sintonía con Rosa Díez. Unos meses después, en abril de 2015, fue expulsado de UPyD por promover la fusión con Ciudadanos de cara a los comicios autonómicos de ese año. Ya dentro de las filas del partido de Albert Rivera logró primero el acta regional y unos meses más tarde volvió a ocupar escaño en el Congreso de Diputados.
En la Cámara baja ha tenido un papel destacado en las últimas legislaturas ya que primero fue vicepresidente primero de 2016 a 2019 y luego vicepresidente cuarto en el efímero mandato del segundo semestre del año pasado. Dentro de Cs fue responsable del área de Justicia desde la expansión de la formación liberal fuera de Cataluña.
El político asturiano fue uno de los protagonistas del terremoto naranja del 24 de junio tras la sorprendente dimisión de Toni Roldán. Aquel grito desesperado del hasta entonces jefe de la oficina económica de Cs para que su partido pactase con el PSOE de Pedro Sánchez un Gobierno de coalición provocó un cisma interno del que Ciudadanos aún no se ha recuperado.
A los pocos minutos del portazo de Roldán se inició la reunión de la Ejecutiva naranja en un clima de enorme tensión. Luis Garicano tomó la palabra pero no llegó a tanto, sino que propuso una abstención condicionada a tres puntos -aplicación de la constitución en Cataluña, lograr un Gobierno constitucionalista en Navarra y cumplir con los criterios económicos y fiscales de la UE- pero Rivera se envalentonó y promovió una votación en el sanedrín de Cs porque se veía con fuerza.
Prendes se abstuvo
Hubo 24 votos en contra a la petición de Garicano, tres abstenciones -Ignacio Prendes, Marta Martín y Orlena de Miguel- y cuatro votos a favor -Javier Nart, Fernando Maura, Francisco Igea y el citado Garicano-. En los siguientes días y semanas hubo un goteo de ruidosas salidas como las de Francisco De la Torre, Javier Nart o Xavier Pericay.
Todos los que votaron a favor del planteamiento de Garicano o se abstuvieron, porque no querían comprometer aquel día el liderazgo de Rivera tras la traumática marcha de Roldán, fueron apartados de los órganos de dirección en los meses siguientes y ninguno de ellos aparece en la lista con la que Arrimadas se va a presentar a las primarias naranjas. Prendes queda ahora sólo como militante de base.
