Conspiranoicos, negacionistas, antivacunas...Las asociaciones científicas alertan que con la pandemia del coronavirus, han aflorado todo tipo de grupos, muy activos desde el fin del estado de alarma, que hacen negocio a costa del miedo. Los mismos que organizan quedadas de 'besos y abrazos' o promocionan productos peligrosos como el MMS (clorito de sodio), un mejunje a base de lejía, como cura frente al virus.Lo peor, advierten, que hay personajes famosos como Miguel Bosé, Enrique Bunbury o Sylvia Pantoja que defienden esos postulados ante miles de seguidores con el peligro que conlleva. La emergencia sanitaria también ha paralizado el plan contra las pseudoterapias impulsado desde el Ministerio de Sanidad en 2018.
"Es sorprendente que, en el siglo XXI, sigan considerando un desinfectante de piscinas (MMS) como si fuera la solución para todo cuando los médicos y las asociaciones científicas están advirtiendo que, no sólo no cura nada, sino que puede producir graves daños en la mucosa intestinal, vómitos, diarreas y, en algunos casos, intoxicaciones muy graves", señala en conversación con Vozpópuli Vicente Prieto, presidente del Círculo Escéptico, una asociación cultural que, con el pensamiento crítico y racional como principal argumento, lleva años combatiendo las pseudociencias.
El pasado marzo, cuando las cifras del coronavirus resultaban insoportables en España, una serie de organizaciones y entidades, entre las que figuraban el Círculo Escéptico, firmaron una carta abierta a las plataformas de contenido online reclamando el control de bulos en salud y material pseudocientífico relacionados con la covid-19 y alojados en sus páginas.
Un plan contra las pseudoterapias paralizado
"Hay decenas de perfiles alojados en diversos canales (YouTube, Facebook, etc.), que de manera continuada y reiterada publican bulos en salud, principalmente pseudoterapias o falsos remedios que, a pesar de ser denunciados por otros usuarios, y retirado puntualmente su contenido, este vuelve a cargarse y difundirse prácticamente instantes después", denunciaban entonces las organizaciones en un documento suscrito, entre otros, por la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas, el Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid (ICOMEM); ARP-Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico o la Asociación Española de Comunicación Científica.
Todo ello, a pesar de que, en 2018, la entonces ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, y el ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, presentaban el Plan para la Protección de las Personas frente a las Pseudoterapias con el que se pretende, entre otras medidas, eliminar las pseudoterapias de los centros sanitarios y las universidades. Las asociaciones científicas, las que mejor conocen colaboraron estrechamente
Un plan que, según explica a Vozpópuli Fernando Frías, abogado, socio fundador de Círculo Escéptico y miembro de ARP-Sociedad para el Avance del Pensamiento Crítico, de momento está parado por culpa de la pandemia. Tanto el Ministerio de Sanidad como el de Ciencia, precisa, no lo dan por abandonado, pero por delante queda todavía, sobre todo por parte del departamento que encabeza Salvador Illa, terminar la lista de pseudoterapias y modificar algunas normas. Con la actual situación sanitaria, el Ministerio apenas ha tenido tiempo de continuar con el trabajo.
El miedo, un campo abonado
"El miedo siempre es un campo abonado para vender todo tipo de charlatanerías. Esta gente ya vendía en su momento el MMS para el ébola. Siempre que hay una cosa así, intentan sacar beneficio", señala Vicente Prieto. Se refiere a un desinfectante que conoce bien. El MMS o clorito de sodio, que tanto Josep Pàmies como otros acólitos, aseguran que es capaz de acabar con el coronavirus.
"Hay que recordar que esto lo descubrió un buhonero que se llama Jim Humble al que, en vez de vender el elixir de serpiente, se le ocurrió vender lejía. Cuando, en Estados Unidos, le prohibieron vender este desinfectante como si fuera medicina, se inventó una iglesia que se llama Genesis II en la que tomar MMS es un sacramento como para otra religión es tomar una eucaristía", señala el presidente del Círculo Escéptico.
El leridano Josep Pàmies, cabeza del movimiento Dulce Revolución, acaba de organizar una fiesta de "besos y abrazos" en Sant Pere de Ribes (Barcelona) a la que acudieron 200 personas sin mascarilla
Lo peor, incide Prieto, es la tibia actuación de las autoridades sanitarias ante sucesos como el ocurrido el pasado 14 de julio. El leridano Josep Pàmies, cabeza del movimiento Dulce Revolución, volvió a organizar una fiesta de "besos y abrazos", esta vez en Sant Pere de Ribes (Barcelona). Nada le importó que la comunidad sea uno de los principales focos de contagio del coronavirus en España.
Consiguió reunir a 200 personas que acudieron al encuentro sin mascarilla ni ninguna otra medida de seguridad y que pretendían mostrar su oposición a las restricciones que imponen las administraciones con el fin de frenar la propagación del virus. Ya lo había hecho antes, y en pleno estado de alarma, en Balaguer (Lérida), según informa el diario Segre.com.
"Es algo muy serio. Entiendo que las autoridades deberían tomar medidas por grave riesgo sanitario. Parece que lo están investigando, pero si surge un nuevo brote no van a tener que buscar mucho de dónde salió", advierte Vicente Prieto. Recuerda que, recientemente, en Texas (Estados Unidos) un hombre de 30 años falleció tras asistir a una 'fiesta covid'.
Son muchos los que, siempre a través de Internet, recuerda el presidente del Círculo Escéptico, han intentado sacar tajada del MMS, un producto prohibido por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) desde 2010. En la pandemia del coronavirus, añade, han visto una oportunidad de oro para promover el uso de un producto que antes, sus defensores, llegaron a decir que curaba el ébola, el sida o, incluso, se atrevieron a afirmar que revertía el autismo.
Una mujer acaba en el hospital tras beber clorito
El pasado 27 de junio la Guardia Civil de Luna (Zaragoza) detenía a una mujer en Piedratajada por un supuesto delito contra la salud pública con resultado de lesiones, tras vender a una vecina de la citada localidad un "bebedizo" como remedio a la cura de la covid-19. Según informaba el Instituto Armado en nota de prensa, la Guardia Civil recibía una llamada de facultativos médicos del Centro Salud de Luna comunicando que la noche anterior, sobre las 23.30 horas, habían asistido a una vecina de 67 años en su domicilio para tratar una intoxicación grave, tras la ingesta de una bebida, por la que tuvo que ser trasladada de urgencia en UVI móvil a un centro hospitalario de Zaragoza.
Según la misma información, la bebida que ingirió la paciente fue comprada a una vecina de Piedratajada como remedio a la enfermedad y otro tipo de patologías. Pagó 20 euros por un bote de 250 mililitros. Con las informaciones recabadas la Guardia Civil obtuvo la identidad de la sospechosa: una mujer de 52 años que se dedicaba supuestamente a la osteopatía, masajes y otras actividades, cuya consulta se realizaba en el propio domicilio.
Tras comprobar que había realizado la venta del citado producto a la paciente, fue detenida en su vivienda de Piedrataja por un presunto delito contra la salud pública con resultado de lesiones. En el domicilio de la detenida, según la Guardia Civil, se percibía un fuerte olor a lejía, hallando multitud de productos base para la fabricación del citado "bebedizo", así como 32.050 euros en efectivo. Además se intervino documentación relevante para la investigación que analiza la Guardia Civil. La bebida, había sido fabricada artesanalmente fuera de todo control sanitario.
Los negacionistas de la covid-19
"Esta pandemia ha cambiado nuestra vida, nuestras relaciones sociales, millones de personas han perdido su trabajo o están en riesgo de perderlo pero, pese a eso, surgen surgen movimientos negacionistas de la covid-19", prosigue Vicente Prieto. Pero, ¿quiénes son los negacionistas?. "Una amalgama de gente que tanto niegan la existencia de la enfermedad, como protestan contra el nuevo orden mundial", contesta Prieto.
Cuando comenzó el estado de alarma, recuerda, y en las ruedas de prensas telemáticas posteriores al comité de gestión técnica del coronavirus, los mandos de la Guardia Civil y la Policía Nacional alertaban sobre el peligro de este tipo de defensores de las pseudociencias y los productos que vendían. Ahora, existe más relajación, apunta. "Mucha gente parece que ya ha olvidado lo que hemos pasado y el resultado son rebrotes por toda España y en muchos países. Las cifras de contagios en Estados Unidos, son terroríficas".
Personajes famosos e irresponsables
Pero sin duda, lo que más preocupa a Prieto es que personajes muy famosos y con millones de seguidores en redes sociales, defiendan estos postulados. Cita el caso del cantante Miguel Bosé, popular en los últimos tiempos por su postura beligerante sobre la covid-19 y todo el universo que se le asocia en forma de teorías de la conspiración, que, además, también defiende el MMS.
El cantante ha defendido en numerosas ocasiones teorías conspiranoicas en torno al origen del coronavirus y su utilización por potencias que quieren dominar el mundo. En sus redes sociales ha arremetido contra el cofundador de Microsoft, Bill Gates quien, en su delirante argumento, tiene un proyecto de vacunas "con microchips o nanobots para obtener todo tipo de información de la población mundial".
"Que gente famosa como Miguel Bosé, Enrique Bunbury o, ahora, Sylvia Pantoja esté atacando una vacuna que no existe y diciendo que si nanorobots o microchips...es un delirio absoluto", señala Vicente Prieto
Bosé llegó a asegurar en su cuenta de Twitter que la farmacéutica GAVI es propiedad de la Fundación Bill & Melinda Gates y que son "especialistas en vacunas fallidas que tantas víctimas han causado alrededor del mundo". El cantante ha encontrado un aliado en el músico Enrique Bunbury que también secunda a Bosé en el rechazo a Bill Gates y una futura vacuna de la covid-19.
"Que gente famosa como Miguel Bosé, Enrique Bunbury o, ahora, Sylvia Pantoja esté atacando una vacuna que no existe y diciendo que si nanorobots o microchips...es un delirio absoluto. Es sorprendente que personajes públicos estén atacando las vacunas, pero sobre todo las que todavía no existen. El problema es que funcionan demasiado bien y hemos olvidado lo que era un mundo sin vacunas. Ahora tenemos un ejemplo de lo que es un mundo sin una vacuna. Pues imaginemos que no tuviéramos para la viruela; el sarampión o la rubeola", añade el presidente del Círculo Escéptico.
Miguel Bosé, recuerda Vicente Prieto, tiene 2.3000.000 seguidores en su cuenta de Twitter. "Con 1 % que se lo crea...es una actitud irresponsable. No sólo se llevan dinero, se llevan salud y muchos de estos grupos, además, son la puerta de entrada a sectas peligrosas", advierte.