Lo que empezó como una simple 'broma' terminó como una pesadilla para Breana Evans, una niña de 12 años procedente de Florida, Estados Unidos. La joven fue suspendida de su escuela y arrestada después de que fuera sorprendida pellizcando el trasero de un compañero en el pasillo del colegio.
La niña señaló que no entendía cómo este incidente cobró tanta relevancia: "Sólo pellizqué el trasero de un niño. No lo herí ni nada"
La madre del niño afectado presentó cargos contra la niña, que culminaron con la detención de Breana, quien señaló a la cadena de noticias WFTV Channel 9 que todo fue una broma como la que puede hacer cualquier otro niño. La niña tuvo que ir con los agentes de seguridad a un centro de justicia de menores para dejar constancia de sus huellas dactilares.
Con el fin de que los cargos de la joven no tuvieran índole "sexual", el padre de la acusada, Ray Evans, ingresó a su hija en un programa de menores de 90 días, que cuenta con servicios comunitarios, clases y controles de drogas. "Si no hago trabajo comunitario, puede que cuando cumpla 18 años sea conocida como una delincuente sexual, así que arruinaría mi mundo, para ser honesta“, indicó Breanna, que una vez haya finalizado el programa todos los cargos desaparecerán de su expediente.
La niña señaló que no entendía cómo este incidente cobró esta relevancia: "Sólo pellizqué el trasero de un niño. No lo herí ni nada". Por su parte, el padre de la joven criticó duramente esta situación: "Dios, a lo que ha llegado a este mundo. Los niños ni siquiera pueden ser niños y eso es básicamente lo que ella hizo. Tiene 12 años y actuó como se supone que actúan los niños de 12 años", sentenció el progenitor.
