El piloto de la avioneta de los años 50 que se ha estrellado este domingo contra un hangar en el aeródromo madrileño de Cuatro Vientos durante una exhibición, ha fallecido esta tarde en el hospital de Getafe debido a las quemaduras sufridas en todo su cuerpo, han informado fuentes del centro sanitario. Fuentes de Emergencias Madrid han precisado a Efe que otras dieciocho personas, entre ellas tres policías nacionales, han resultado heridas de diversa consideración, todas de carácter leve.
El accidente se ha producido poco después de la una de la tarde cuando, por causas que se desconocen, un avión "saeta" bimotor español de los años 50 se ha estrellado contra el exterior de un hangar que acoge los helicópteros de la Policía Nacional. El aparato ha entrado en barrena y ha recorrido una calle de servicio frente al hangar hasta terminar chocando con la parte trasera de la nave y tras haber perdido diversas piezas, entre ellas un ala, que han afectado a seis coches que se encontraban en la zona, según Emergencias Madrid.
El piloto, un militar de 34 años al que no le tocaba volar hoy, ha quedado atrapado entre los restos de la cabina de la avioneta, que ha explotado al colisionar con el hangar, lo que ha producido un incendio que ha sido sofocado conjuntamente por bomberos de Aena y del Ayuntamiento de Madrid, que le han rescatado aún con vida. Samur-Protección Civil ha trasladado al piloto a la Unidad de Quemados del hospital de Getafe, donde ha fallecido horas después debido a las quemaduras sufridas en todo su cuerpo.
En el siniestro han resultado heridas, además, dieciocho personas, la mayoría trabajadores de las instalaciones, salvo tres policías nacionales, una mujer y dos hombres, que se encontraban en el hangar donde ha impactado la aeronave. Cinco de los heridos, empleados del aeródromo, han sido atendidos por el Summa de intoxicación leve por humo cuando trataban de enfriar el incendio desatado como consecuencia del impacto, han informado a Efe fuentes de Emergencias Comunidad de Madrid 112, que han añadido que los cinco han sido dados de alta en el lugar.
Los trece restantes, incluidos los tres policías, han sido atendidos por el Samur, entre heridas, contusiones e intoxicaciones, todas de carácter leve, si bien cinco de los heridos han sido trasladados a hospitales de la región para someterles a diversas pruebas. Entre los agentes policiales heridos, la mujer presenta quemaduras de primer y segundo grado en cara y cuello, y ha sido ingresada en el hospital La Paz, mientras que los dos varones han sido atendidos por hipertensión e intoxicación leve por humo, y dados de alta en el lugar.
Más detalles sobre el accidente
El accidente ha tenido lugar durante una de las exhibiciones acrobáticas que se celebran en Cuatro Vientos todos los primeros domingos de mes, organizadas por la Fundación infante de Orleans, según ha confirmado a Efe uno de sus miembros, José Antonio Martínez. La aeronave ha chocado contra un hangar del aeródromo, a 100 metros de distancia del lugar donde alrededor de 3.000 personas, según los organizadores, presenciaban la exhibición, ninguna de las cuales ha resultado herida.
Martínez ha explicado que el piloto pertenece a la fundación, con sede en el aeródromo madrileño, y que sustituyó en la demostración a un compañero, porque a él no le correspondía hoy volar.
El accidente se ha producido cuando en un momento del vuelo, el reactor bimotor "que volaba a baja altura y muy en picado, ha entrado en barrena y al no poder levantar el morro ha impactado contra el suelo causando una explosión", ha añadido el representante de la Fundación.
Fuentes de Aena han confirmado a Efe el siniestro, que ha sido comunicado a la Comisión de Investigación de accidente de Aviación Civil, que se ocupará del análisis de las causas del suceso.
El aeródromo de Cuatro Vientos, situado a ocho kilómetros del centro de la capital no se encuentra operativo en estos momentos, han agregado las fuentes. Decano de los aeropuertos españoles, es un aeródromo de utilización conjunta civil-militar, destinado a vuelos de aviación general.
En la instalación conviven escuelas de vuelo, servicios del Estado (Dirección General de la Policía, Dirección General de Tráfico o Tragsa), empresas de trabajos aéreos, de mantenimiento, de formación de técnicos de mantenimiento, representantes-instaladores de fabricantes de aeronaves, y equipos y empresas de servicios asociados.
Al menos veinte personas han muerto en los accidentes aéreos ocurridos en España en vuelos de exhibición, desde 1984 hasta la fecha. El más grave se produjo el 6 de junio de 1992 en Vistabella (Castellón) cuando seis ocupantes de un helicóptero Bell-206 Long Ranger perdieron la vida en un vuelo de demostración a una representación de la Cruz Roja.