La foto que se ha hecho el escritor Boris Izaguirre con un grupo de manifestantes añade más polémica a la que ya se respira en Venezuela a causa de las protestas estudiantiles que desde hace una semana llevan a cabo los estudiantes venezolanos y que han sido duramente reprimidas por el gobierno. Izaguirre, quien se encuentra en Caracas, posó para una fotos con tres manifestantes encapuchados. La imagen ha creado polémica en las redes sociales tanto con mensajes de apoyo como de rechazo ante su acción.
Las protestas, motivadas por la solicitud estudiantil de más seguridad -en Venezuela una persona es asesinada cada 10 minutos por el hampa-, han sido duramente reprimidas por el Gobierno. Hasta el momento, han muerto tres estudiantes, hay cientos de heridos y detenidos, muchos de ellos víctimas del abuso policial denucniado por los estudiantes. El peesidente Nicolás Maduro ha amenazado a los colectivos estudiantiles que protestan en todo el país, también ha cortado el servicio de transporte público en algunas zonas de la capital y ha amenazado con llevar a la cárcel a líderes opositores, entre ellos a Leopoldo López, organizador de la marcha pacífica que desembocó en las protestas.
Esta semana, en su columna del diario El País, Boris Izaguirre tomó posición a favor de los estudiantes y denunció no sólo la represión y poco talante de diálogo del gobierno de Maduro, sino que dio detalles de la escasez de alimentos y la precariedad en la que viven actualmente los venezolanos.
El líder opositor venezolano Henrique Capriles llamó al Gobierno a poner fin a las "torturas" y la represión y abra un "camino verdadero hacia la paz", porque ya es el momento de que reine la tolerancia y se rechace la violencia. "Exigimos al Gobierno que cesen las torturas, que cese la represión, que se abra un camino verdadero hacia la paz que deseamos millones de venezolanos", indicó Capriles en una carta abierta publicada hoy en varios diarios del país. El excandidato presidencial, que se desmarcó la semana pasada de los llamamientos a marchar contra el Gobierno formulados por dirigentes opositores como Leopoldo López y María Corina Machado, pidió respeto a la Constitución y reclamó poner la democracia por encima de cualquier interés personal.
