La recién creada Fuerza de Información del Gobierno de Birmania ha desmentido que decenas de desplazados de la minoría musulmana rohingya estén intentando escapar del país hacia Bangladesh, cuya guardia aduanera indicó ayer que había ordenado retroceder esta semana a 200 desplazados que intentaban huir de lo que, según ONG y activistas, se trata de una campaña militar de exterminio contra esta población.