Con Franco aún vivo pero convaleciente, el hoy Rey fue poco a poco sustituyéndole en actos oficiales mientras la dictadura daba sus últimas boqueadas. Casi 40 años después, y con el régimen surgido de la Transición más cuestionado que nunca por culpa, entre otras cosas, de los escándalos de corrupción, el heredero al trono vuelve a sustituir al Jefe del Estado aquejado también de graves problemas de salud y en medio de no pocos incógnitas acechando el futuro de la Corona.