El coronavirus ha supuesto un parón en seco para la vida de mucha gente, que ha dejado de lado proyectos, aunque fuese de manera temporal, para poder adaptarse a las exigencias que ha traído esta pandemia. Para algunos, esta situación no solo no ha frenado su vida, sino que ha servido como un nuevo comienzo. Es el caso de Miguel Ángel Reinoso, que gracias a sus datos diarios sobre el desarrollo de la enfermedad se ha convertido en toda una estrella de Twitter.
Miguel Ángel vive en Valladolid y ha estudiado magisterio infantil, aunque no ejerce esta profesión. También ha sido árbitro de fútbol durante once años, pero un descenso de cuarta división a preferente le desmotivó a seguir. "Era mayor ya para alcanzar una Segunda División B o algo mayor", ha contado para Vozpópuli.
Cuando comenzó el confinamiento trató de comprender lo que estaba sucediendo y lo hizo con datos. "Inventé una fórmula matemática para analizar lo que estaba sucediendo en China e Italia, porque entendía que esto se iba a reproducir en España", asegura. De esta forma, empezó su recopilación de datos diarios que le ha llevado a superar los 105.000 seguidores en Twitter.
Twitter no da ingresos per sé, pero sí le permite tener la visibilidad suficiente como para recibir donaciones: "Un seguidor me dijo que quería hacerme un Bizum, yo le dije que mi contenido era gratuito pero él insistió"
"Un día decidí informatizar los datos para que fuesen más fáciles de calcular", nos cuenta. Sin saberlo, estaba iniciando el principio de lo que le haría famoso después. "Contesté a un tuit del Ministerio de Sanidad con datos durante el confinamiento y ahí ya empezó a seguirme gente, que me pedían más datos".
Poco a poco, el twitter de @mianrey comenzó a tener presencia en el muro personal de los españoles. "Cuando veía 1.000 seguidores me parecían una barbaridad para alguien que está en casa preparando datos". Después llegaron algunas entrevistas en medios de comunicación que le permitieron aumentar su popularidad. "Al principio era casi abrumador, ahora me voy acostumbrando", comenta.
Los datos se han convertido en un trabajo y ahora se centra casi en exclusiva a ello. Twitter no da ingresos per sé, pero sí le permite tener la visibilidad suficiente como para recibir donaciones de sus seguidores a través de Bizum: "Todo comenzó cuando un seguidor me dijo que quería hacerme un Bizum. Yo le dije que mi contenido era gratuito pero él insistió. <<Lo que haces es un trabajo y como tal, debe ser remunerado>>".
Gracias a las donaciones, Miguel Ángel puede dedicarse a los datos. Reconoce que no se está haciendo rico con esto, pero si le sirve "para vivir"
De esta manera, esos datos que le servían para conocer qué estaba pasando ahora le permite tener una remuneración. "Depende del mes, pero me sirve para vivir". El objetivo es no cambiar lo que está haciendo, es decir, ofrecer contenido gratuito y aceptar aquello que los seguidores quieran darle en señal de agradecimiento sin tratar a unos mejor que a otros.
Lo que no acepta es dinero de publicidad. "Me han ofrecido promocionar mascarillas, filtros de oxígeno e incluso me han contactado de alguna gran casa de apuestas, pero no me parece ético", asegura.
El éxito de Miguel Ángel Reinoso: no entra en política
Su éxito se basa, según dice, en no entrar en política. En un ambiente tan crispado como el que vivimos a nivel parlamentario, él ha escogido por dar datos de manera aséptica, sin interpretación alguna. Tan solo interviene cuando se ofrecen datos que son erróneos. "Terrorismo informativo", lo califica. Porque ahora "estamos en una situación muy buena y hay veces que parece que seguimos en marzo de 2020. Lo peor ha pasado gracias a las vacunas".
Nos habla, en concreto, de una gráfica del informativo de Antena 3 del pasado lunes, en el que se mostraba la incidencia acumulada de la pasada semana. En ella, se representó el fin de semana completo como un de los días de la semana, lo que provocaba una subida de los casos mucho más abrupta de lo que era en realidad. "No se pueden mostrar gráficas retocadas que causan alarma social, porque hay muchas consecuencias psicológicas".
Según señala, esto es especialmente notorio en nuestros mayores, ya que "ellos no tienen acceso a fuentes de información alternativas a la televisión y gracias a datos como estos, no quieren salir de casa". También está en contra de algunos titulares en los que se dice que "la pandemia se dispara" porque no es así.
"Decir que la pandemia crece mucho o que la incidencia acumulada se dispara sirve incluso para dar alas a los antivacunas, porque les permite decir que estas no sirven para nada cuando la realidad es que si estamos así es gracias a la vacunación".
La pandemia algún día acabará y sus datos dejarán de ser útiles a la población. Preguntado sobre esto y dónde se ve en un futuro, afirma que no piensa en ello. "Tengo muchas ideas en la cabeza, entre ellas volver a mi vida normal de antes, pero no sé que haré". Ve con claridad que no quiere escribir un libro y que siente "un enorme apoyo" por parte de sus seguidores: "Me siento muy arropado".
"Decir que la incidencia se dispara sirve incluso para dar alas a los antivacunas, porque les permite decir que estas no sirven para nada"
Pese a su creciente fama, Miguel Ángel sigue siendo un joven anónimo. "No me suelen reconocer por la calle, porque al fin y al cabo yo escribo datos y no suelo salir en ninguna pantalla. Me ha pasado un par de veces, pero es más normal que todo suceda en las redes, ya que intentan seguirme en instagram y otras redes sociales".
Por último, le preguntamos por la fecha del fin de la pandemia, ya que fue capaz de acertar, gracias a las matemáticas, en qué fecha se alcanzaría la inmunidad de rebaño en España: "Yo solo puedo analizar gráficas y de ahí sacar conclusiones inmediatas o a corto plazo". Por lo tanto, el tiempo para disfrutar de los datos de Miguel Ángel es aún una incógnita que esperemos que sea corto, al menos si tienen relación con el coronavirus. Él opina igual: "Ojalá el fin de la pandemia llegue pronto, por salud física y mental".