Pedro Sánchez ha ordenado entregar las concejalías de Igualdad a Podemos allí donde el PSOE gobierne en coalición con los morados, para acallar así las duras críticas de las socialistas contra la ministra de Igualdad, Irene Montero, por introducir en la legislación la llamada agenda Queer que patrocina la “autodeterminación” transexual. Se trata de borrar así la lucha de las mujeres contra su discriminación histórica so pretexto de integrar al colectivo LGTBI, critican a Vozpópuli diversas fuentes de ese sector.
De momento, la reorganización se ha materializado este noviembre en dos importantes ciudades: Getafe (Madrid) e Irún (Guipúzcoa), pero irá extendiéndose a otras. Por ejemplo, estaba previsto hacerlo en Baena (Córdoba) si hubiera triunfado el pasado 26 de noviembre la fallida moción de censura que planeaban PSOE e IU. El objetivo, en cualquier caso, insiste otra fuente, no es tanto laminar a las feministas del PSOE como “afianzar” la alianza rojo/morada hasta las próximas elecciones municipales y autonómicas.
La operación está siendo pilotada desde la sede federal en Ferraz por un hombre de la máxima confianza de Pedro Sánchez y secretario ejecutivo de Coordinación Territorial en la Ejecutiva, el navarro Santos Cerdán, quien, junto a la vicesecretaria general, Adriana Lastra, son los máximos defensores de la coalición con Podemos, tanto en el Gobierno como en autonomías y ayuntamientos; y los muñidores del pacto con Bildu y ERC que ha hecho posible la aprobación de los Presupuestos 2021 y conjurado la amenaza de elecciones anticipadas.
Está reorganización restará poder a Carmen Calvo en su pulso con Irene Montero porque ella, como Secretaria de Igualdad del PSOE, se reúne con mujeres de federaciones que van a perder poder municipal
Al acuerdo de supervivencia logrado aprisa y corriendo por Sánchez y Pablo Iglesias el 11 de noviembre del pasado año, al día siguiente de la repetición de unas elecciones generales en las que a ambos no les fue demasiado bien -el PSOE perdió tres diputados y 700.000 votos, y Podemos siete diputados y 636.000 papeletas-, siguió un también apresurado reparto de poder tras la investidura del presidente del Gobierno, por el cual Montero asumía en exclusiva las políticas de igualdad en el nuevo gabinete.
El organigrama vería la luz no sin una fuerte resistencia de quien hasta ese momento había gestionado Igualdad en el primer ejecutivo monocolor socialista, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, que dio su brazo a torcer pero ha seguido ejerciendo una labor de zapa, dicen sus críticos en Podemos... y en el PSOE.
De hecho, está reorganización municipal va a restarle poder en su pulso con Montero porque, como secretaria de Igualdad socialista, seguía reuniéndose en Ferraz con las secretarias de cada federación y ejerciendo una suerte de “contrapoder” a través de las consejerías autonómicas y las concejalías, señalan fuentes conocedoras de la situación.
Incluso por cuestión generacional, Calvo defiende en privado la lucha contra la “autodeterminación sexual” que abanderan en público Amelia Valcárcel, Ángeles Álvarez y otras históricas del socialismo frente a Podemos, resumidas en la Alianza contra el borrado de las mujeres, aunque, por razones obvias, no firmó la carta que una docena de ellas ellas al presidente del Gobierno. De hecho, la número dos lleva meses con un perfil absolutamente bajo en el gobierno por orden expresa de Sánchez, que no quiere escuchar más quejas sobre las broncas de Igualdad en las reuniones semanales que ambos mantienen.
El “machista frustrado” Campo
Y es que, ya en marzo, dos meses después de que el Ejecutivo echara a andar, Calvo y, sobre todo, el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, estallaron contra la mala técnica legislativa de la reforma de los delitos sexuales. “Redacción farragosa” (sic) e invasión de competencias de otros ministerios decía el informe de Justicia convenientemente filtrado a la prensa contra la ministra de Igualdad. Esto enfureció a Iglesias que reaccionó llamando “machista frustrado” a Campo.
A la vuelta del verano, en plena pandemia, las escaramuzas entre los dos socios se han reproducido a propósito de la Ley Trans, que va a permitir a los transexuales elegir sexo y cambiar género el DNI solo con una declaración de intenciones. Y Sánchez, por presiones de Pablo Iglesias, ha decidido acabar con el foco del conflicto entre su propio partido y su gobierno.
Podemos ha decidido llamar a la tradicional “concejalía de Igualdad” de la ciudad guipuzcoana de Irún con el añadido “y de LGTBI”
Una muestra del giro de concepto que se va a dar a partir de ahora lo representa el hecho de que la Concejalía de Igualdad de la segunda ciudad guipuzcoana, Irún, ha pasado a llamarse “de Igualdad y LGTBI” y la va a ocupar la edil morada Miren Extebeste. El acuerdo del PSE con Elkarrekin-Podemos tiene la característica de que es la segunda etapa del histórico pacto de los dos partidos con Bildu para mantener en la alcaldía al socialista José Antonio Santano, que lleva desde 2002, sin necesidad de echar mano una legislatura más del PNV.
El acuerdo entre Elkarrekin Podemos y el PSE-EE para gobernar en coalición en Irun es una gran noticia que sigue afianzando un rumbo de progreso en cada vez más lugares, con los derechos sociales y los servicios públicos como eje. Enhorabuena @DavidNuno_ y @PodemosIrun https://t.co/Kl2vFvVUgf
— Pablo Iglesias ?{R} (@PabloIglesias) November 28, 2020
En la ciudad madrileña de Getafe, su alcaldesa, Sara Hernández, también ha metido en el gobierno del ayuntamiento a Unidas Podemos y ha dado a su líder local, Alba Leo, la segunda tenencia de alcaldía y las áreas de "feminismo y Agenda 2030", las mismas que ocupan Irene Montero y Ione Belarra en el Gobierno de la Nación. Por su parte, Isabel Espinosa tendrá delegadas las competencias en Juventud, Salud y Consumo -dependiente del ministro Alberto Garzón en el Gobierno-.
El acto se llevó a cabo con gran aparato escénico: el lunes 23 de noviembre en el Teatro García Lorca de la ciudad, después de que la militancia del PSOE local aprobara el acuerdo con el 93,5% de los votos, y en presencia del secretario general del PSM y delegado del Gobierno, José Manuel Franco, y del líder de Unidas Podemos en Madrid, Jesús Santos.
Así celebraba la nueva teniente de alcalde getafense el acuerdo municipal entre Podemos y los socialistas madrileños:
Ayer fue un día muy intenso y agridulce, pero hoy decido hablar de lo bueno, lo malo me lo guardo para mí porque me sirve para aprender y ser mejor... abro hilo breve? pic.twitter.com/XV6ZxNZZeI
— Alba Leo (@alba_leo) November 20, 2019