El martes 17 de marzo de 1992, un atentado terrorista destruyó la embajada de Israel en Buenos Aires causando la muerte de 22 personas y heridas graves a 242 más. Dos años después, lunes 18 de julio de 1994, un coche bomba redujo a escombros la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en la capital, con un saldo de 85 muertos y 300 heridos. Casi 300.000 personas de ascendencia judía viven en Argentina, el 80% de las cuales en Buenos Aires. Después de 12 años de investigación, la justicia argentina, con aportaciones de los servicios de inteligencia americanos e israelíes, acusó formalmente al gobierno de Irán de planificar un atentado que, como mano de obra, fue llevado a cabo por la organización terrorista libanesa Hezbollah, que alienta y financia Irán. Argentina había sido elegida como blanco del ataque tras la decisión de su Gobierno de suspender toda transferencia de tecnología nuclear a Irán. Todos los Gobiernos argentinos desde entonces han tratado de entorpecer la labor judicial. El 13 de enero de 2015, el fiscal Alberto Nisman tuvo los santos redaños de presentar una denuncia contra la entonces presidenta Cristina Kirchner como supuesta encubridora de los atentados, pero 5 días después, horas antes de presentar su informe al Congreso, Nisman apareció muerto de un disparo en la cabeza en su apartamento de Buenos Aires. Tan cerca como el pasado jueves 11 de abril, casi 30 años después de aquella masacre, la Cámara Federal de Casación Penal, máximo tribunal penal argentino, dictaminó que ambos atentados “respondieron a un designio político y estratégico de la República Islámica de Irán y fueron ejecutados por la organización terrorista Hezbollah”. El fallo sostiene que la voladura de la AMIA fue, además, un crimen de “lesa humanidad”, abriendo la puerta para que Argentina demande formalmente a Irán. El presidente Javier Milei aplaudió el fallo judicial, y su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó que el Estado argentino, que ha cursado órdenes de detención a la Interpol contra miembros del Gobierno iraní, promoverá el enjuiciamiento criminal de los prófugos por el atentado.
Prácticamente hay que buscar con lupa en internet para encontrar en la gran prensa occidental, esa que ahora derrama ríos de tinta hablando del “genocidio” israelí en Gaza, la noticia del trascendental fallo de la justicia argentina condenando a Irán como autor intelectual de esas matanzas. Ni una línea en los medios españoles. Estuve en ese país de vacaciones hace pocos años. Me impresionó su gente, su amabilidad, su ansia por conocer de primera mano el mundo exterior, su cordialidad para invitarte a tomar un té en su casa por cualquiera que manejara cuatro palabras de inglés; me maravilló, sobre todo, su ansia de libertad, hasta el punto de considerar imposible el mantenimiento en tiempo de la dictadura de los Ayatollahs. El iraní es un pueblo excepcional, mayoritariamente laico, que sufre la represión tiránica de una odiosa casta religiosa. La República Islámica se ha fijado como objetivo la destrucción del Estado judío, la única democracia plena existente en Oriente Medio. Y desde su fundación martillea las defensas de Israel por mano interpuesta desde Iraq, Siria, Líbano (Hezbollah), Yemen (Hutíes) y Gaza (Hamás). Asombra ver cómo la izquierda y una mayoría de medios toleran una tiranía sanguinaria que cuelga a los homosexuales de las grúas y reprime a las mujeres que se arriesgan a salir a la calle sin velo, mientras condena duramente a un país plenamente democrático cuyo Constitucional acaba de tumbar la pretensión del Gobierno Netanyahu de recortar la independencia de su poder judicial. Sobrecoge comprobar cómo el odio a Israel lleva a la izquierda española y mundial y a buena parte de los medios a apoyar a una dictadura atroz como la iraní.
Asombra ver cómo la izquierda y una mayoría de medios toleran una tiranía sanguinaria que cuelga a los homosexuales de las grúas y reprime a las mujeres
Porque, según esa izquierda y esos medios, Israel no tiene derecho a defenderse. No solo eso, sino que debería dejarse conducir mansamente hasta ahogarse en el mar, como reza el eslogan de moda que estos días corea el perroflautismo internacional. Como escribiera el judío lituano Wladimir Rabi, luego nacionalizado francés, “nosotros nunca olvidaremos. No podemos olvidar porque hemos sido los arrastrados del mundo. Contra nosotros todos han tenido licencia”. No había ninguna razón, ninguna provocación previa, para la masacre del 7 de octubre, el mayor pogromo de judíos ocurrido en un solo día desde el final de la II Guerra Mundial. La razón, como días atrás escribía Alain Finkielkraut, es que “para Hamás, la organización que gobierna Gaza con mano de hierro, no hay diferencia entre soldados y civiles: cada israelí, hombre o mujer, niño o anciano, es un enemigo, un criminal que debe ser eliminado”. No hay Estado que pueda permitir la existencia en su puerta trasera de una organización terrorista dispuesta a eliminarlo por la fuerza. ¿Cómo no entender, entonces, la represalia en Gaza tras lo ocurrido el 7 de octubre? Y, naturalmente, en toda guerra mueren inocentes, aunque los muertos en el “genocidio” gazatí han sido fundamentalmente terroristas de Hamás, gente que suele utilizar a civiles como escudos humanos. Lo explica el también galo Gilles-William Goldnadel: “Deploro sinceramente la muerte de niños en Gaza. Pero me niego a confundir a un terrorista que masacra voluntariamente a un civil, con un soldado que involuntariamente mata a un civil para alcanzar al terrorista que se protege detrás de su cuerpo”.
Seis meses después del 7 de octubre, de aquella matanza apenas se habla. Los muertos de Gaza han enterrado a los del kibutz en la tumba de una memoria colectiva manipulada por unos medios de comunicación dispuestos a infligir a Israel una doble derrota: la evidencia de su vulnerabilidad, no obstante el prestigio de que siempre han gozado su ejército y sus servicios de inteligencia, y la de verse hoy en el banquillo de los acusados por “genocida”. Impresiona la satisfacción con la que la prensa zurda utiliza impunemente el término “genocidio” contra el Estado judío. Los bombardeos occidentales sobre Mosul y Raqqa en 2017, con miles de víctimas, o los conflictos de Sudán o Congo, con millones de muertos y desplazados, por citar solo dos tragedias recientes, no han merecido ni la décima parte de crítica que ahora ha concentrado la ofensiva israelí en Gaza. Todo vale contra un pequeño pueblo de apenas 15 millones en un mundo habitado por 8.000 millones de almas.
Los bombardeos occidentales sobre Mosul y Raqqa en 2017, con miles de víctimas, o los conflictos de Sudán o Congo, con millones de muertos y desplazados, por citar solo dos tragedias recientes
Es la vieja retórica antisemita del totalitarismo soviético que no solo no desapareció con la caida del muro de Berlín, sino que, como al olmo seco del soneto de Machado, las lluvias de abril y el sol de mayo del suicidio de las elites occidentales han hecho brotar una poderosa rama de hojas nuevas dispuesta a reñir la vieja y singular batalla entre la libertad y la tiranía. Es el inconsciente judeofóbico siempre latente en un progresismo que, puesto que no puede con el “gran Satán”, Estados Unidos, destila todo su odio contra el “pequeño Satán”, Israel, travestido así en espejo o encarnación del Estado-nación occidental. Hablamos de un Israel convertido en doble víctima en su condición de blanco y judío, modelo involuntario de ese colonialismo occidental que esclaviza a los pueblos (puro pensamiento woke), en este caso a una Autoridad Palestina (no digamos ya a Hamás) que ha rechazado todos los acuerdos (paz por territorios) que le fueron ofrecidos en el pasado reciente. Es ese nuevo fascismo que se hace llamar a sí mismo “antifascista”, aderezado con el viejo antisemistismo de raíz nazi del que nunca ha abdicado la izquierda comunista y alrededores porque nunca tuvo su merecido Nuremberg.
Todos los medios que hablan de “genocidio” en Gaza y exigen la inmediata retirada del ejército israelí ponen un cuidado exiquito a la hora de ocultar la existencia de más de cien rehenes todavía en manos de Hamás, cuando a la organización terrorista, empeñada en la destruicción de Israel, objetivo al que ha sacrificado cualquier intento de proporcionar una vida digna a los habitantes del enclave, le resultaría muy fácil desmontar la estrategia israelí poniéndolos en libertad. ¿Cómo después de la masacre del 7 de octubre podría el Gobierno, ahora de concentración nacional, que preside Netanyahun retirarse de Cisjordania y aceptar la creación de un Estado palestino que pondría a todo Israel dentro del alcance de sus misiles? La República Islámica de Irán y sus brazos armados, Hamás entre ellos, no quieren la coexistencia con Israel, sino su exterminio, una situación igualmente desastrosa tanto para israelíes como para palestinos, que nos sitúa ante la abrasadora evidencia de que la única posibilidad de solución duradera capaz de hacer posible la coexistencia entre ambos pasa por la derrota definitiva del Islam radical y su incapacidad para causar daño. Pasa por derrocar la dictadura de los Ayatollas de Teherán.
En este avispero se ha metido un mediocre con ínfulas que responde al nombre de Pedro Sánchez, el Mélenchon hispano, el líder de esa Francia Insumisa, para quien el pogromo del 7 de octubre fue “una ofensiva armada de las fuerzas palestinas lideradas por Hamás”. Pedir la creación de un Estado palestino sin, al mismo tiempo, exigir el reconocimiento al derecho a existir del Estado hebreo, es de un cinismo sólo concebible en la barahúnda argumental de este pigmeo intelectual y moral, un cero a la izquierda en el plano internacional, experto en abordar problemas que no puede resolver. No deja de tener su gracia, por lo demás, que quien con saña persigue la destrucción de España y su ordenamiento constitucional pretenda arreglar un embrollo como el de Oriente Próximo. Sabemos lo que a este pájaro le importan palestinos y/o israelíes. Lo que trata, ha tratado, es de esparcir de nuevo tinta de calamar con la que ocultar durante unos días, lo que dure dura, su desastrosa posición interior, la situación de debilidad extrema de un Gobierno sin presupuestos que no puede gobernar, sumido en una aguda crisis institucional, con un delincuente en el exilio por socio preferente, rehén en el País Vasco -como hoy volverá a quedar en evidencia-, de los nacionalistas del PNV y de los filoterroristas de Bildu, y ahogado por la corrupción, corrupción que empieza por la que directamente afecta a la señora con la que, un suponer, se mete en la cama. Lo único genuinamente verídico que el conflicto palestino ha aflorado en él es su evidente antisemitismo. No le falta de nada. Todo lo tiene bonito mi María Antonia. Por lo demás, la gente decente siempre estará al lado de la civilización y en contra de la barbarie. Junto a Israel y contra Hamás.
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Kj26
Para mejor información de lo que estamos hablando conviene visitar la pagina web: thisishamas . com Quítenle los dos espacios antes y después de la coma. En las primeras líneas de la misma podemos leer: "De sus cámaras - 7 de octubre de 2023 Este sitio web contiene contenido violento y gráfico que puede resultar perturbador. Aconsejamos precaución a los espectadores. Para escuchar el audio, haga clic en el icono situado en la parte inferior derecha del vídeo" Las imágenes les helaran el corazón, si lo tienen. Muestra videos tomados por los propios asesinados, por los que escaparon por los pelos o por los primeros que llegaron a la masacre. Por favor, que alguien las pase a Sánchez y a las hermanas de Hamas que tiene en su gobierno. A ver si se les cae la cara de vergüenza
Kj26
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fanayana
Gran artículo como siempre de Jesús Cacho.
pancho
Los que no paran de tratar de "nazis" a los que no piensan como ellos, son en realidad tan antisemitas como los antiguos nazis.
Norne Gaest
Magnífico artículo. Irán es la mayor esperanza de que del Islam se puede sobrevivir, aunque está por demostrar como y cuando se consigue. Persia quedó sepultada por el imperialismo islámico en el siglo VII, dando poco después, durante la edad de oro medieval, la mitad de los más destacados representantes culturales. Hoy la mayoría del pueblo iraní, sobre todo jóvenes, mujeres y exiliados, quiere desprenderse de la dictadura islámica de los curatos y sus esbirros. En cuanto al antisemitismo de la izquierda, efectivamente no les falta de nada, como vergüenza que son de nuestras sociedades. Un antisemitismo que añadir a su indesmayable contribución a la destrucción de Occidente, la única civilización con libertad hoy existente. Con su buenismo progre sectario no solo impiden el control de la inmigración sino que desarman moral, cultural y materialmente a Occidente. Recordemos que para ellas el varón blanco occidental es el culpable por antonomasia, y si no es de los suyos mucho más. Y naturalmente son culpables sus grandes países, empezando por los Estados Unidos y acabando por Israel. Habría que estudiar con profundidad por qué Occidente produce estos cánceres en su seno. En España, a más del infecto progresista, tenemos nazionalismo tribal, racista y separatista en la mitad de las regiones, con la facultad de someter a sus chantajes a un tahur sin escrúpulos al frente del gobierno, mientras las organizaciones de izquierdas, con tal de chupar del Estado ( de los contribuyente), tragan, se contradicen y venden el país. Hoy hay elecciones en las Vascongadas y veremos un ejemplo de una sociedad enferma, votando abrumadoramente a partidos separatistas o no democráticos, aunque luego, si se pregunta a los vascos y las vascas, la mayoría dice que no quiere la independencia (no les conviene) y seguro que todos se consideran demócratas.
Farragut
Sánchez carece del más mínimo recurso ético o moral, apoyado en el gobierno por los herederos de una banda terrorista dirigida por un cómplice e instigador de asesinato. Se alinea con Irán, inclina la cabeza en Arabia frente a un asesino y es felicitado por Hamás, autores de una matanza atroz, que, no lo olvidemos, es una organización palestina que contó en Gaza con más del setenta por ciento de los votos. Cada vida inocente es una tragedia sin parangón pero resulta inconcebible que todos los paises occidentales, se traguen sin rechistar las cifras de víctimas en Gaza anunciadas por Hamás. El siniestro sicópata que gobierna España está en una enloquecida huida hacia adelante. El contenido de su teléfono y el de su señora, que será devastador, queda ensombrecido por la podredumbre de la corrupción que les enfanga junto a su partido.
UnodeTantos
Bildu no son "los herederos de la Eta", son la Eta, el T. Supremo ya determinó en su día que Bildu son los testaferros de la Eta, Otegui es un individuo condenado por ser un terrorista de la Eta, hay una veintena de etarras en distintos puestos de Bildu, uno que fue jefe de la Eta tiene un cargo en Bildu, etc.
None
… Mi comentario no lo han publicado. Ha debido ser por los tacos, ja, ja. Me hago cargo. Discúlpenme. Perdón, pero es que con lo del terrorismo (en especial contra Israel y contra España), y por aquello del desapego hasta del desapegp se me va el Zen al Tibet…. ocupado. Tíbet ocupado, digo, por las ratas chinas comunistas que no tienen agua y la roban… como siempre hacen los comunistas. Mentir, robar y matar. Rata no es taco, ¿no? ….
Dip
Opino lo mismo, a este señor le pagan por promocionar lo que ahora denominan "música urbana", y que no son más que derivados de música latina, basura pura y dura que se ha cargado la música para siempre. Se atreve a despacharse hasta con el pop-rock.... Eso caballero era música , y no una tal Rosalía, que dice hacer música, y no lleva ni a un músico en su escenario ....
E1958
Creo que el titular, intencionadamente, confunde antisemitismo (odio a los judíos por el hecho de serlo) con antisionismo que es estar en contra de una ideología nacionalista radical, supremacista y excluyente que, tras la II Guerra y con el apoyo incondicional de EEUU consiguio hacerse con territorios palestinos que no ha dejado de ampliar a lo largo de los años y en los que lejos de pretender integrar sólo se ha dedicado a expulsar a los diferentes. ¿Cuanto puede durar un país tan pequeño cuya política está permanentemente en contra de todos los de su entorno?.
[email protected]
Menos mal que nos ilustra el autor. No sabía que los pobres judíos solo estén defendiéndose, bombardeando civiles, hospitales, ambulancias y centrales eléctricas. Y ahora quieren entrar en el resto de la franja que les falta, seguro que para repartir golosinas a los niños. Tampoco dejan que entren camiones con comida y suministros médicos. Unos auténticos angelitos, aunque los de Irán no sean mejores. Tampoco son mucho peores
MkGregor
Estimado Jesús, un domingo más, has hecho un artículo absolutamente sesgada de una situación tan compleja. El origen, por tener alguna referencia temporal, es bastante más lejana a 1992 pero ahora no voy a detallarte una "chapa" histórica. Te recomiendo la visión de la película "Munich" de un judío universal como es Spielberg donde relata los meses posteriores a la masacre en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972, cuando a un comando del Mossad busca encontrar y asesinar a once palestinos responsable de atentado terrorista. Pronto se da cuenta que actúa de la misma manera que esos terroristas a los que busca eliminar y reflexiona que eso desencadenará un bucle infinito. El final de la película es una visión de las torres gemelas como premonición de lo que posteriormente ocurrió. La herida de lo que está ocurriendo hoy en Gaza no tiene cicatrización posible y es el germen futuro de acciones y reacciones por ambas partes. De nuevo el bucle infinito que irá a más. Por muchos actos salvajes y terroristas de Hamas, lo que está haciendo Israel ahora es absolutamente lamentable e impresentable. Israel se pasa por el foro resoluciones de la ONU, incumple la ley internacional, expropia casas y expulsa gente que no tiene ninguna culpa de vivir donde lo está haciendo... En fin, un sinsentido que no tendrá fin hasta que el desenlace sea mucho más dramático por escalada armamentista.
Helena
Señor Cacho. Otra vez gracias. Refiriéndome a lo de Sánchez, creo que ya no se sabe qué decir. Estamos sobrepasados ante este gusano inmundo. Espero que, por lo menos, acabe muy mal.
Grossman
En Israel fueron asesinados 1400 civiles, a mano, torturados, violados y humillados, en Rusia 140, es decir 10 veces más que en este atentado brutal. Pero si tenemos en cuenta la diferencia de población entre Rusia e Israel, también 10 veces mayor, el impacto es como haber asesinado a mano a más de 100.000 rusos en un atentado. Y la izquierda europea y nuestro sátrapa quieren que no hagan nada. Hitler cuando ya tenía perdida la guerra se encerró en un búnker en el centro de Berlín, se parapetó detrás de millones de civiles alemanes y espero pacientemente la muerte de millones para después suicidarse. Se calcula que esta batalla final costó un millón y medio de muertes civiles para acabar con el mayor asesino de la historia del mundo, con permiso de Stalin. La hipocresía, maldad intrínseca de la izquierda, su fariseísmo se ha desplegado en todo su esplendor, la misma que no dijo nada mientras más de un millón de ruandeses eran asesinados a machetazo limpio, ante un mundo occidental ¿civilizado? que asistió impasible ante un drama muy fácil de evitar pero que no quisieron. Sánchez, en su inmundicia moral, como los terroristas de Hamas amigos suyos, en este drama solo ha visto la oportunidad de parapetarse entre las víctimas civiles involuntarias para tapar sus miserias del personaje vil y corrupto que es. Solo quiere tapar la trama de corrupción que ha montado, con su mujer al frente, como esos matrimonios macabros del poder absoluto que de vez en cuando nos regala la historia, la maldad “familiar” la más totalitaria. Y quizás un día lo veamos en una pose de propaganda, como esa foto de estudio, totalmente manipulada, de una supuesta tía con el cadáver de su supuesta sobrina, foto perfecta, ropaje perfecto, luces perfectas, colorido, retorcimientos y ropajes que todo lo ocultan. Muy bien podría se Sánchez quien estuviera envuelto en tanto ropaje haciendo de falsa dolorosa para su mundo de propaganda y corrupción. Para él, para Hamas, los civiles son su arma de defensa y su arma de victoria es el derrotismo y la decadencia de un mundo occidental incapaz de defender los principios de libertad y de luchar contra ellos, como en su día se hizo contra Hitler.
Erondattt
Madre mía, vaya descarga de propaganda. Leer sobre el conflicto en España es llorar. Peor que con el asunto de Ucrania, el Nordstream2, la central de Zaporiya, la presa de Nova Kakhovka, el Covid que nace de una noche de juerga entre un pangolin y un murciélago en un mercado húmedo -sic- en Wuhan, las inoculaciones de ARNm que evitan contagiarte y contagiar y que con una solo basta, y tantas otras en esta Era hiperbólica de bulos y desinformación oficiales a fuer de censura, cancelaciones etc Menos mal que gracias a Internet uno puede acceder 'todavía' a los análisis y podcasts de John J. Mearsheimer, Douglas MacGregor, Phil Geraldi, Larry Johnson, Scott Ritter, Paul Craig Roberts, Tucker Carlson, Mike Benz, Ray McGovern , Max Blumenthal, Gideon Levy, Ilan Papé, Whitney Webb, Lawrence Wilkerson, Alastair Crooke y tantos otros. Y en español a Vidal&Ramírez. La coral monocorde española en todos los medios, Tvs, radios, prensa etc impresiona.
Pelosi
Hoy es un día de luto, hoy es el día en que una gente querida como los vascos, ahogados en el fascismo y el adoctrinamiento, van a consumar el delito de votar a una sarta de asesinos comunistas y a otra de supremacistas mentirosos y meapilas para que canalicen su odio a España llevándoles a la independencia. Es duro habiendo querido y admirado a los vascos y lo vasco darte cuenta de lo equivocado que estabas; la supuesta gente callada y sencilla, formal y fuerte ha mutado, gracias a las ikastolas, en una caterba de catetos violentos y cobardes, sin respeto a nada (vergonzantes las imágenes de dos botarates del Athetic orinando en la puerta de la Basílica del Santísimo Cristo de la Expiración de Sevilla o del habitual silbido general al hinmo de España) y rebosantes de drogas y alcohol. El País Vasco es una sociedad enferma que ha viajado del orden al caos, que se ha olvidado de lo bueno de lo tradicional para dar paso al libertinaje más absoluto combinado con el miedo a la discrepancia, propio de cualquier estado totalitario. Dicen las encuestas que si los vascos votaran la independencia, la mayoría dirían que no; claro, pero no es por sentirse españoles sino porque viven de nosotros, los sucesivos gobiernos españoles, fruto de una Ley Electoral delirante, les prestan servicios, les dan inversiones con el dinero que corresponde a otras regiones para conseguir votos en Madrid de partidos que desprecian España y por otro lado gestionan su región con un grado de independencia sin par a nivel global, una bicoca. Hoy un partido con asesinos en sus listas va a tener casi medio millón de votos y va a gobernar en Vascongadas, hoy un pueblo antiguamente de gente buena va a consumar algo sin precedentes: el odio va a gobernar en Euskadi. El plan del Felón y sus jefes quema una etapa muy importante en su camino a la conversión de España en una Torre de Babel totalitaria, y llena de moros, eso sí. Winter is coming.
Gala
Buenos días mundo. Enhorabuena Cacho, texto para ser leído en los colegios tan abandonados por esta grey inculta y oportunista.
Mcpherson
Ni un solo argumento, ni una frase coherente. Sólo una lista de nombres en un intento de parecer listo sin tener que demostrarlo. Cuando uno es listo no tiene que esforzarse tanto en parecerlo.
syloxozi
Estimado Sr. Cacho: En efecto, el exudado antisemita de SáncHez es connatural a su obsesiva patología por el poder. Desde tiempo inmemorial los judíos han sido odiados en todas las culturas por su carácter de sociedad cerrada, getizada e independiente que escapa al control de los gobiernos. A SáncHez le fascinan los regímenes políticos que persiguen el control absoluto de la sociedad porque en el fondo el fascista es él. Admira las dictaduras cubanas, venezolanas, rusas e islámicas, incluyendo la marroquí, que es dictadura de facto dominada por el monarca y su majzén. Eso es evidente y hay incluso fotografías suyas inclinándose ante Mohamed VI y otros sátrapas de su calibre (me refiero al calibre de sátrapa de SáncHez). Yo creo que su empecinamiento por resucitar a Franco responde no solo al interés electoral sino también a esa disfunción mental que padece. Todas estas satrapías odian a los judíos porque escapan a su control y en el subconsciente de SáncHez esto es intolerable. Este carácter antisemita, que ya era viejo en la Edad Media, se extiende a toda la izquierda, por los mismos motivos. Apenas he visto alguna imágen fugaz del ataque de Hamás. Al igual que se difunden muy a menudo las imágenes de lo que ocurría en los campos de exterminio nazis sin que a nadie se le caigan los palos del sombrajo, Netanyahu debería difundirlas para que el mundo viera lo que realmente pasó, Aunque me temo que la respuesta de la izquierda sería la tristemente consabida "ALGO HABRÁN ECHO ...(esas mujeres torturadas, esos bébes carbonizados, esas familias asesinadas al completo)".
Mcpherson
Me refería al ridículo comentario de Erondatt, no al editorial, que me parece espléndido.
Caplan
Artículo excelente y mil gracias a usted Sr Cacho por tener la ocasión y el privilegio de poder leerle.Con su artículo me ha dado la , probablemente, única lectura de entre todos los digitales que me reconfortará durante mucho tiempo.
Gala
Vaya, a la redacción no le ha gustado mi primer comentario donde invitaba a los israelíes a venir de vuelta y a asentarse aquí a ver si con su ayudita nos enseñan algo para que nosotros también consigamos estar entre ese casi 100% de premios nobel que ellos consiguen. Realmente, la humanidad es idiota. Redacción, no os agobiéis, da igual.