Siete años han pasado desde que conociéramos el divorcio entre la infanta Elena y Jaime de Marichalar. Siete años en donde no han faltado polémicas, principalmente en la educación de su hijo, Felipe Juan Froilán, quien, tras un gran número de suspensos en sus evaluaciones y un disparo en el pie más tarde, ha puesto rumbo a un caro internado en Estados Unidos para finalizar sus estudios.
Pero, lo cierto es que a la hermana del rey no se le ha conocido pareja estable, pese a que sí se ha dejado ver en numerosas inauguraciones y actos públicos de la capital en todo este tiempo.
Esto no quiere decir que no haya tenido algún amigo especial. En este caso entra el nombre de Luis Astolfi. Los que conocen a la hija de Don Juan Carlos de Borbón, dicen que fue su gran amor de juventud –sucedió entre 1986 y 1989, cuando ella tenía 23 años y él, 27-.
Y aunque después de jóvenes, ambos se casaron, en los dos casos el matrimonio ha terminado en divorcio. De hecho, el aristócrata vinculado al mundo de la hípica, contrajo matrimonio en 1990 con Isabel Flórez, a la que también conocía de su infancia, y se separaron en 2012 porque Isabel así se lo pidió, según 'Vanity Fair'.
Hoy, los rumores de que esta amistad ha recobrado fuerza y son cada vez más insistentes desde el pasado año 2013. Y aunque, el pasado día 15, Elena de Borbón no pudiera participar en un torneo hípico de Sevilla, consecuencia de su accidente a caballo hace tan solo unas semanas, eso no le impidió asistir para ver competir a su amigo sevillano de 54 años.
Luis tiene dos hijos de su anterior matrimonio, Luis y Marina, de 21 y 18 años, respectivamente y pertenece a la élite deporte de la que Elena es tan fanática, ha participado en los Juegos Olímpicos hasta en cuatro ocasiones y cuenta con numerosos trofeos tras sus más de treinta años de competición.
Ahora, fuentes presenciales en el último torneo de caballos, aseguran que la sintonía entre ellos es latente y que en todo momento se dedican una atención especial el uno al otro, según recoge la agencia ‘Gtres’.