Aunque las cifras de suscripciones netas a lo largo de 2014 indican que está siendo uno de los mejores ejercicios desde hace tiempo, con casi 27.000 millones de euros en suscripciones netas hasta agosto, según los últimos datos de Inverco, la gran mayoría de los fondos no han sido agraciados con la elección de los ahorradores.
De los 2.115 fondos (sin contar con los de gestión pasiva, ni los de inversión libre ni los inmobiliarios) registrados en la asociación profesional del sector), únicamente el 35,6% han recibido entradas netas de dinero a lo largo de estos ocho meses por un importe superior al millón de euros, un porcentaje que indica la sobreoferta que existe en el mercado español de fondos de inversión.
A cierre del mes pasado, había registrados en total 2.310 fondos, una cifra que en los últimos meses ha ido creciendo después del descenso que arrastraba desde el año 210, cuando se contabilizaban 2.345 fondos. El impacto de la crisis financiera mundial se dejó notar en 2009, año en el cual la cifra bajó a su mínimo de 1.920 fondos. Y a pesar del proceso de reestructuración de entidades financieras que ha experimentado España durante los últimos años, la cifra de fondos parece que está volviendo a su antiguo cauce.
Es significativo que solamente 754 fondos de inversión españoles hayan registrado entradas netas de dinero por un importe superior al millón de euros porque demuestra en cierta medida la falta de perspectiva del ahorrador español, que se deja guiar por las grandes entidades financieras, que controlan las redes de distribución del mercado de fondos.
Teniendo en cuenta que únicamente 382 fondos de inversión superan los cien millones de euros de volumen patrimonial y que de ellos, solamente 17 cuentan con un patrimonio mayor de 1.000 millones, el sobreexceso del número de fondos en la industria de inversión española parece que no está justificada.