Inverco envió al Gobierno unas propuestas con motivo de la elaboración de una nueva Ley Financiera, para potenciar la inversión colectiva. Entre ellas, está la supresión del 1% aplicado a los fondos y sicavs en concepto de impuesto de sociedades y la eliminación del número mínimo de inversores.
Así consta en la memoria de 2013 de la asociación.
Peticiones lógicas y que acabarían en gran medida con la polémica existente con las sicav, a las que se denuncia erróneamente de elusión fiscal, por la creencia de que ese tipo de sociedades es el único gravamen que soportan. Tanto fondos como sicav tributan bajo el régimen de incremento de patrimonio, mediante el cual el titular paga al fisco en el momento del reembolso.
El asunto volvió a saltar a la palestra tras el escándalo de los planes de pensiones de los eurodiputados, registrados en una sicav luxemburguesa.
Además, Inverco quiere eliminar el número mínimo de accionistas de las sicav, situado en 100. Esa exigencia, única en Europa, también ha levantado polémica históricamente, ya que la sociedad de inversión ha sido en muchos casos un vehículo de inversión particular, incluso familiar.
De esta manera, los 100 partícipes se lograban de manera meramente administrativa: los célebres ‘mariachis’.
Todo ello está recogido en 14 propuestas, de carácter financiero, fiscal o con rango de orden ministerial.
Inverco ha defendido siempre la desaparición de ese tipo híper reducido de sociedades. Si no existiera, no habría saltado la polémica.
Algunas fuentes señalaban que en la reciente reforma fiscal era un momento apropiado para abordar estas medidas de impulso a la inversión colectiva, pero de momento ningún gobierno se ha atrevido.