La fórmula que permite calcular la revalorización de las pensiones no sólo es turbia en su resultado. Es, además, opaca en sus variables ya que el Ejecutivo ha incumplido 15 días después de su entrada en vigor el compromiso de publicar los elementos que permiten llegar a esa cifra. Pese a que la Ley que regula el Índice de Revalorización del Sistema de Pensiones incluye un compromiso de “aplicación transparente”, Trabajo sigue sin detallar cómo ha llegado al cálculo del 0,25% que anunció antes de hacer pública la ecuación.
La norma incluía un compromiso: “El factor de sostenibilidad se aplicará con absoluta transparencia”. Para ello requería que se publicara no sólo “el seguimiento sistemático de la esperanza de vida” que se comenzará aplicar a partir del 1 de enero de 2019, sino también “el valor de las variables que intervienen en su cálculo” y que se ha comenzado a aplicar a partir de la revalorización del año 2014, es decir con efectos de 1 de enero. Ninguno de esos conceptos ha sido detallado por el Ejecutivo ni en los informes mensuales de Seguridad Social ni de manera independiente.
La fórmula publicada en el B.O.E. el pasado 26 de diciembre fijaba el siguiente cálculo:
Lo único que el Gobierno ha despejado en esa ecuación es la incógnita: las pensiones subirán un 0,25%, tal y como anunció antes de conocerse el sistema de cálculo. Sin embargo, las variables que debieran conducir a ese resultado siguen sin ser conocidas.