La futura venta de AENA se topará con un problema que ya encontró el último Gobierno de Zapatero cuando quiso vender el gestor aeroportuario público. Un destacado grupo de potenciales inversores no está dispuesto a participar en el proceso si el Estado prosigue como accionista mayoritario de la sociedad. Y así será, de acuerdo con lo manifestado este miércoles por el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá.
El número 2 del Ministerio de Fomento también avanzó que el departamento estudia una colocación en bolsa que podría dirigirse tanto a inversores institucionales como a minoristas. El anterior intento de privatizar parcialmente AENA pinchó en la demanda de los institucionales y con éste podría suceder lo mismo.
El hecho de que el Estado mantenga una participación mayoritaria en la sociedad retrae el interés de potenciales interesados en invertir en AENA, especialmente grupos de construcción y servicios. “Si el Estadio mantiene más de un 50% seguirá mandando y nosotros lo que podemos ofrecer es básicamente gestión. Pero si no vamos a poder tener peso en la gestión, no nos interesa entrar”, aseguran desde uno de estos grupos.
“El planteamiento realizado por el Ministerio de Fomento hace pensar que lo que está buscando son socios financieros, básicamente fondos de inversión, con lo que nosotros estamos de más”. La intención de Fomento es lograr ingresos extraordinarios que contribuyan a reducir el déficit del Estado con lo que la hipotética colocación en bolsa de AENA no será precisamente barata. “Se trata de una inversión demasiado elevada para que después la gestión siga siendo la misma”.
Elevado endeudamiento
Uno de los problemas a los que se enfrenta AENA es que la gestión de los últimos años no ha sido precisamente modélica. La compañía arrastra una deuda muy abultada, por encima de los 12.500 millones de euros y, además, también cuenta con unos muy elevados costes dada la amplia plantilla con la que cuenta, pese a haber llevado a cabo un ERE de 1.160 trabajadores.
Así las cosas, toda parece indicar que Fomento irá en busca de inversores puramente financieros para que inviertan en AENA. En este sentido cabe destacar el fichaje por parte de la gestora IFM de Nicolás Villén, exconsejero delegado de Ferrovial Aeropuertos, como asesor para su fondo de infraestructuras, con vistas al proceso de privatización de los aeropuertos españoles
Mientras, los grupos de construcción, servicios y concesiones españoles siguen apostando por el negocio de los aeropuertos aunque, como sucede con el negocio de la construcción, lo hacen en el exterior. Entre otras, destaca la presencia precisamente de Ferrrovial en la última fase del concurso por la nueva terminal del aeropuerto de Chicago, para la que lleva como aliado al gigante australiano de las infraestructuras Macquarie.
Fase de estudio
No obstante, Rafael Catalá ha matizado que "el proyecto está sin cerrar" y que Fomento está analizando las alternativas para ver cuándo hay mercado, ya que todas las salidas a Bolsa están asociadas a que se pague el valor de la compañía. Por ello, ha asegurado que si los mercados financieros valoran a Aena, que está mejorando su cuenta de resultados, se llevará a cabo la privatización durante este año.
"No vamos a salir a Bolsa sí o sí ni vamos a vender Aena sí o sí", aseguró Catalá.