Lo reconoció el Gobierno a principios de agosto, pero es ahora, coincidiendo con el fin de la temporada alta, cuando lo que entonces parecían meros lamentos suena ya como gritos a viva voz. Escandalizado por la inminente subida del IVA, el sector turístico aguarda iracundo otro hachazo post-vacacional anunciado: el tajo en los pasados Presupuestos a la partida destinada a financiar las vacaciones de las personas mayores a través del Instituto de Mayores y Servicios Sociales, más conocido como Imserso. El recorte se produjo hace ya tiempo, pero solo a comienzos de este mes el Ejecutivo del PP confesó tal cosa.
El tijeretazo, en resumen, reduce de 103 millones de euros a 75 el presupuesto que cuenta el Imserso para promover el programa destinado a vacaciones y al mantenimiento del empleo en zonas turísticas con viajeros nacionales en edad avanzada. Un ahorro del 25% que emana de los pasados Presupuestos Generales del Estado, pero que dio a conocer el Gobierno hace casi un mes en una ronda de preguntas parlamentarias, encabezadas por la diputada socialista y ex ministra Rosa Aguilar. “En este momento económico desfavorable es necesario priorizar otras partidas como las pensiones no contributivas o las ayudas a la dependencia”, fue la respuesta del Gobierno.
El turismo también ha respondido: numerosas patronales directamente ligadas con el sector –cadenas de hoteles, agencias de viajes- han alertado de una “hecatombe invernal”, en palabras de la federación hotelera mallorquina FEHM. El Imserso funciona en temporada baja y sirve para alimentar un activo en periodo de depresión turística y, de paso, para mantener un buen puñado de empleos. La patronal de las agencias de viajes CEAV ha calculado que el número de viajeros del Imserso puede reducirse a la mitad con el recorte del 25% del presupuesto del instituto.
Ceav cifra en 1.084.000 los paquetes de vacaciones para mayores subvencionados el año pasado. Tras el tijeretazo, esta patronal cree que el número oscilará ahora entre 500.000 y 800.000. “No podemos vivir de la temporada de tres meses, por muy buena que haya sido, no es sostenible ni para el destino ni para las empresas”, señala a Preferente.com Inma de Benito, de la federación hotelera de Mallorca. Solo en Baleares, en el invierno de 2011 abrió el 10% de los hoteles de la comunidad, entre ellos los 45 que bregaron con el Imserso. Con menos ofertas, ahora los pensionistas reducirán sus viajes, hundiendo las modestas expectativas del sector fuera de la etapa estival.