Una gran bandera española cubre toda la portada del rotativo francés Libération, donde aparece en el centro, entre exclamaciones, la palabra ¡perdidos!, con un discreto asterisco que lleva, algo más abajo, a la traducción francesa ('¡perdus!'), seguida de un aseveramiento sobre la situación actual del país: "A pesar de los sucesivos planes de Europa, España se hunde en la crisis. En Madrid se habla de un país laminado".
La polémica portada pronto se veía reflejada en las redes sociales. Con hashtags como #portada o #RescateTotal miles de personas se hacían eco del diario francés y discutían sobre la estrategia del Gobierno de dar información a la prensa extranjera en un intento de generar buena imagen que ayude a devolver la confianza en la economía nacional, algo que parece lejano por el momento.
La forma directa de afrontar la situación crítica de la economía de países con problemas no es nueva para Libération, que en otra ocasión ya hizo algo parecido con Grecia, titulando en griego 'Caos', en alusión al ambiente de descontento y frustración que vive el país heleno.
Ahora la moraleja también parece clara. Pese a los esfuerzos de los ministros de Economía o Hacienda, incluso del propio Mariano Rajoy, Europa empieza a ver a España como un país hundido por la crisis y con necesidad clara de ayuda exterior. En las páginas interiores el rotativo titula "un verano caliente para una España seca", en clara referencia a la situación española.
Pero no solo en Europa se empieza a vislumbrar muy oscuro el futuro español, sino que también desde el otro lado del atlántico llegan opiniones sobre las complicaciones económicas nacionales. También el periódico uruguayo El Observador se refería a España con una portada donde se veía el famoso toro de Osborne representado únicamente en esqueleto sobre una bandera de España con la frase "Rescaten a España".
