Mémesis

El prófugo menos buscado por la justicia

Un prófugo dando un mitin mientras la policía monta un macro dispositivo para detenerle es lo más español que ha pasado nunca. El repaso a la semana en X

  • El prófugo menos buscado por la justicia

Hay una parte importante de la población catalana que no se considera española, pero no hay nada más español que un prófugo de la justicia paseando por el centro de Barcelona con 80 cámaras grabándole, mientras la policía monta un macro dispositivo para detenerle cortando todas las carreteras de la ciudad. Puigdemont cumplió su promesa y volvió a España, dio un discurso público y aprovechó para llevarse un par de cartones de tabaco, que en Bélgica ya está el paquete de Chester a 13€. Eso si se ha ido, que ni siquiera se sabe.

Se especula que podría seguir en Barcelona y pasar el resto de sus días viviendo en el subsuelo de una familia de 8 apellidos catalanes, a lo Anna Frank, recibiendo calçots por una rejilla mientras espera que se acuerden de él en otra Ley de Amnistía. Pérez Reverte ha sido el que mejor ha calificado el esperpento en un tweet que se ha hecho viral: “Mortadelo y Puigdemont”. De hecho hoy han contado que, tras su discurso, Puigdemont se escondió en una carpa de la que salió con un gorro de paja como el que habían repartido a todos los asistentes al acto, para confundirse entre ellos. Como cuando Clark Kent se quitaba las gafas para convertirse en Superman y nadie le reconocía.

Es imposible no pensar que el paripé tiene que ver con el acuerdo del gobierno con ‘los otros’ independentistas’ para la investidura. Y si el ex president quiere tensar un poco más la cuerda, perfectamente puede pararse a firmar autógrafos en la Puerta del Sol mientras un equipo de buzos de la Guardia Civil inspecciona las alcantarillas. Así que recapitulando: el prófugo más buscado por la justicia española vuelve a España y pasea por Barcelona durante horas y a día de hoy, la única detención que ha sufrido Puigdemont la sufrió Joaquín Reyes cuando se disfrazó de él para una pieza de El Intermedio y un abuelo llamó a la policía.

El esperpento ha eclipsado en X otros temas que hay que seguir de cerca. Maduro ha declarado la guerra a WhatsApp, ‘un instrumento demoníaco y fascista”. Y las fans de Taylor Swift le han declarado la guerra al ISIS después de que se cancelasen tres conciertos de Viena por un intento de atentado. Esto es como cuando los nazis declararon la guerra a la Unión Soviética. Pero el Tuitopía de hoy es casi un monográfico sobre Puigdemont.

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