Con la petición de imputación de José Luis Ábalos el magistrado Ismael Moreno un salto importante en la investigación que dirige. El conocido hasta ahora como caso Koldo ha adquirido una nueva dimensión tras la actuación contra el que fuera ministro de Transportes y las menciones al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a raíz de los mensajes de Víctor de Aldama. Precisamente, el juez otorga por primera vez un papel central al comisionista, hasta el punto de atribuirle la creación de todo este entramado.
En concreto, el juez atribuye a este empresario una "acción corruptora" que le sitúa en la cúspide de todas las actuaciones llevadas a cabo por esta presunta organización criminal. Para los investigadores, Aldama es eje central tanto en la consecución del contrato de mascarillas a la empresa de la trama, como en las negociaciones del rescate de Air Europa, la visita del Delcy Rodríguez o la compra de un chalet para Ábalos.
Detrás de todas estas aristas que se han ido desvelando en esta causa se encuentra un mismo hombre, que llegó a estar a sueldo de Air Europa en plena negociación del rescate que autorizó Moncloa. De esta forma Moreno ha aprovechado su último pronunciamiento para definir el papel de los cabecillas de este caso situando a Aldama en el origen de todo y a Ábalos en la ejecución de algunos de sus planes, por su cargo como ministro de Transportes.
La "acción corruptora" de Aldama
A falta de que avancen las pesquisas, las mismas amagan con seguir salpicando a Moncloa, teniendo en cuenta que Aldama aludió en varios de estos asuntos a Pedro Sánchez en su condición de "jefe 1". Este comisionista, a quien también se le atribuyen en aquel momento reuniones con Begoña Gómez, alardeó de sus contactos en las más altas esferas de este Ejecutivo. "Con el nuevo Gobierno, lo que se quiera", llegó a confesar en una las conversaciones incautadas por la UCO.
Ahora el juez ha dado un paso al frente al pedir al Tribunal Supremo que impute a Ábalos por tres delitos (organización criminal, tráfico de influencias y cohecho) y por remitirle toda la causa. De hecho, en un auto separado a la exposición razonada y al que ha tenido acceso Vozpópuli, el magistrado solicita a la Sala Segunda del alto tribunal que se pronuncie sobre si es competente para asumir toda la causa o únicamente lo que afecta al exministro socialista, quien debe ser investigado en este órgano por su condición de aforado.
A día de hoy puede concluirse, de manera indiciaria, que la selección de Soluciones de Gestión habría partido de Aldama y algún alto cargo del Ministerio de Transportes con la permanente participación de Koldo
Moreno señala el camino a seguir al alto tribunal apuntar que hay indicios "fundados y serios" para acordar una imputación "clara y concreta" contra Ábalos. De él dice que ocupa un "papel principal" en el "entramado creado por Aldama". Los indicios a los que alude el juez son los relativos a la adjudicación de los contratos de emergencia a la empresa de la trama, las negociaciones para sacar adelante el rescate de Air Europa y el presunto concierto con la red que le pagó un chalet en Cádiz y el alquiler de un piso en el centro de Madrid a su entonces pareja.
En relación con el primero de los puntos, Moreno explica que Ábalos pudo ser el alto cargo que ordenó contratar con Soluciones de Gestión. Esta causa, que arrancó la Fiscalía Anticorrupción en el año 2022, puso el foco en los contratos que los ministerios de Transportes y de Interior firmaron con Soluciones de Gestión. En concreto, apuntaron a adjudicaciones por valor de 54 millones de euros que se fraguaron antes de las publicaciones oficiales y que les granjearon unas ganancias limpias de 17 millones de euros.
Ábalos y Sánchez, los "jefes" de Aldama
Moreno concluye que, "de manera indiciaria", la selección de Soluciones de Gestión "habría partido de Aldama y algún alto cargo del Ministerio de Transportes, con la permanente participación de Koldo". Para Moreno, la auditoría del Ministerio que actualmente dirige Óscar Puente y las pesquisas de la UCO llevan a poner el foco en Ábalos o alguien de su gabinete, como los responsables de la contratación con la empresa de Juan Carlos Cueto.
El juez se apoya no solo en las declaraciones escuchadas en sede judicial, sino también en los mensajes incautados a la trama. Destaca uno enviado por el entonces secretario general de Puertos del Estado, Álvaro Sánchez Manzanares, a Koldo, en el que le pidió que le recordara a "Jose" que contactara "con su presi". El entonces asesor del ministro respondió con un escueto: "Lo que sea, me dice José (...) pero que estén las mascarillas".
En relación con el rescate de Air Europa, el magistrado hace suyo el relato de la UCO acerca de la implicación en los hechos del presidente del Gobierno, su entonces ministra de Economía y Ábalos. El juez recuerda las reuniones celebradas a mediados de julio de 2020 y cómo Aldama iba teniendo conocimiento del asunto gracias a Koldo García. Tras ello, daba parte a Javier Hidalgo, dueño de la aerolínea rescatada con más de 475 millones de euros.
El juez concluye que las conversaciones halladas a Aldama permiten apreciar que "se valió de su relación con Ábalos" para influir en la concesión final del rescate. Cabe recordar que en aquella época Aldama estaba a sueldo de la mercantil de los Hidalgo y que, además, había sido contratado para recuperar una deuda de 200 millones de euros de Venezuela con la firma. A finales de verano llegó a felicitar a Javier Hidalgo por la operación, que no se formalizó hasta semanas después.
El chalet de Ábalos
En ese sentido, el magistrado menciona en varias partes de este asunto al presidente del Gobierno, confirmando que se trataría del "jefe 1" y que participó en el Consejo de Ministros al que aludió el comisionista en uno de sus mensajes. "Acabo de hablar voy para ya, el ministro está en este momento con el presidente en el consejo Saliendo le cuenta la situación y nos llama incluso con el presidente ahora te veo”, dijo.
En tercer y último lugar, el juez pone el foco en varias viviendas de las que hicieron uso Ábalos y su entonces pareja y que gestionó la propia trama. En paralelo a la concesión de los contratos de pandemia, Ábalos comenzó a seleccionar viviendas que remitía a Koldo, hasta que a finales de ese año se adquirió un chalet en la Alcaidesa (Cádiz). El juez explica que Aldama "ejerció de verdadero responsable y organizador de la compra del inmueble" y que, para adquirirlo, se valió de Claudio Rivas, socio suyo en la trama de los hidrocarburos.
Del mismo modo la trama también costeó el alquiler de una vivienda en el centro de Madrid en la que residió Jessica, la entonces pareja del 'exnúmero tres' del PSOE. De los mensajes se desprende que esta presunta organización criminal maniobró para 'enchufar' a la joven en Ineco, una empresa pública dependiente de Transportes. "De lo expuesto en los anteriores apartados, a juicio de este Instructor, se desprende la existencia de indicios fundados y serios que evidencian la presunta participación de D. José Luis Ábalos en los hechos (...), que llevarían a estimar su posible responsabilidad penal respecto los delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias y cohecho", concluye el juez.
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