Irene Montero y su gente no se libra de una polémica. Un miembro de su equipo fue detenido el pasado domingo en el aeropuerto de Santiago tras una pelea con un miembro de la Policía Nacional, que resultó herido tras la trifulca, y tuvo que pedir la baja médica.

Según informa 'La Voz de Galicia', el incidente se produjo cuando en el aeropuerto le pidieron al coordinador de área en el gabinete de Irene Montero, llamado José Andrés del Reino Cárdenas, que pagara un suplemento en la puerta de embarque de la aerolínea con la que volaba. Tanto él como su pareja se negaron a pagar.

Ante la negativa de la pareja y la elevación de tono del político, los trabajadores del aeropuerto de Santiago tuvieron que llamar a la Policía Nacional. Hasta allí se dirigió un agente del aeródromo de Lavacolla, que le pidió a Del Reino que se identificara. Supuestamente, el cargo de confianza de Irene Montero se negó de malas maneras y con violencia (según el policía, el político le dio algún empujón) y su pareja, lejos de apaciguar, comenzó a grabar la escena con su teléfono móvil.

Para tratar de reducir el escándalo y recuperar el normal funcionamiento del aeropuerto, el agente trató de dirigir a Del Reino a un cuarto privado, pero éste seguía negándose. En este momento, el detenido aseguró que le estaban deteniendo "porque era de Podemos" y amenazó al guardia diciéndole que le iban a quitar el uniforme.

La lesión se produjo porque la pareja del político trataba de entrar en la sala, abriendo violentamente la puerta y en uno de los intentos del guardia por que no entrara en la sala, su mano quedó atrapada en la puerta, provocándole heridas que ahora le impiden trabajar.

Ante su lesión y viendo el comportamiento de la pareja, cercanos a la ministra de Igualdad, Irene Montero, el agente tuvo que pedir refuerzos y una patrulla se acercó hasta el lugar de los hechos, detuvo a Del Reino y le llevó a dependencias policiales, donde pasó la noche en un calabozo. A la mañana siguiente fue puesto en libertad. Al salir, puso una denuncia contra los agentes, argumentando que él también fue agredido.

Según fuentes del Ministerio de Igualdad, no habían sido informados de los hechos, y se han limpiado las manos explicando que se trata de un funcionario de carrera y no de un alto cargo, pese a que accedió a su puesto (por el que cobra un complemento específico de más de 21.000 euros) mediante el procedimiento de libre designación.

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