El Departamento de Energía de Estados Unidos cree que la pandemia sí pudo originarse en un laboratorio de Wuhan. De hecho, ahora lo baraja como la opción más probable. Así lo afirma el The Wall Street Journal en una información exclusiva en la que cita como fuentes a un informe de inteligencia clasificado y miembros clave del Congreso de Estados Unidos.

Este cambio de parecer -anteriormente descartaron la opción de una procedencia artificial- surge gracias a una actualización de un documento de 2021 redactado en la oficina de la directora de Inteligencia Nacional, Avril Haines. De esta forma, el Departamento de Energía se une a la teoría defendida por el FBI, que mantiene desde 2021 que el virus procedía de un laboratorio. Mientras tanto, hay dos agencias de inteligencias que mantienen la teoría de que la transmisión fue natural, mientras otras dos se mantienen indecisas.

Desde The Wall Street Journal afirman que esta nueva conclusión es importante por el papel que tiene el Departamento de Energía: tiene una experiencia científica considerable y es el organismo encargado de supervisar una red de laboratorios de Estados Unidos, entre los que se encuentran algunos que investigan biología avanzada.

Aunque las fuentes de este diario no quisieron ofrecer detalles sobre qué ha hecho cambiar de parecer al Departamento de Energía, sí afirman que les permite concluir que el covid-19 se propagó tras una fuga involuntaria de un laboratorio chino. Ahora, consideran que la teoría de su procedencia animal desprende "poca confianza", según el informe actualizado.

Aunque esta actualización, que posee menos de cinco páginas, no fue solicitada por el Congreso, sí ha servido para que varios miembros del partido republicano presionen a la administración Biden para que ofrezcan más información sobre estas nuevas pesquisas.

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