El titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Sueca (Valencia) citará a declarar en calidad de investigado al representante legal de la empresa organizadora del festival Medusa de Cullera, en el que murió un joven de 22 años y otras 40 tuvieron que ser atendidas cuando un reventón de aire provocó la caída sobre los asistentes de las estructuras del festival.

El instructor ha citado también a los representantes de las dos empresas implicadas en la dotación y montaje de dichas estructuras, así como al arquitecto responsable del proyecto técnico y a un responsable de la empresa externa contratada por el Ayuntamiento de Cullera para la supervisión de la infraestructura, según han confirmado a Europa Press fuentes judiciales.

La fiesta se saldó con el desalojo de 50.000 personas

El Juzgado investiga el incidente registrado en la madrugada del 13 de agosto en el Medusa de Cullera, que provocó la muerte de un joven de 22 años y la hospitalización de cinco más, aunque el total de atendidos superó los 40. La dirección del festival tuvo que desalojar a los 50.000 asistentes que estaban en el recinto y suspender definitivamente la fiesta.

El juez citó la pasada semana al perito que realizó el informe sobre el incidente. Tras recibir el informe pericial y dar traslado del mismo a las partes, el instructor acordó citarle para que ratificara el contenido. El informe sobre el recinto recoge que hubieron fallos de montaje en los anclajes de determinadas estructuras auxiliares; la documentación del proyecto de actividad era insuficiente ya que en ella no se describían todas aquellas estructuras consideradas auxiliares y de ahí que se instalaran sin supervisión de los técnicos responsables y había instalaciones que no estaban en el proyecto inicial.

El causante: un reventón cálido

La tragedia llegó de la mano de un desplome de aire, conocido como "reventón cálido", impactó sobre el terreno en el que se encontraba el recinto del festival Medusa. De un momento a otro, en la madrugada del 13 de agosto se levantaron vientos de hasta 100 km/h, además de una subida de las temperaturas de más de 10ºC y una caída de la humedad. El fenómeno provocó el desprendimiento de algunas estructuras del escenario y los accesos al recinto, que causaron la muerte del joven y heridas a tantos otros.

El resultado fue la muerte del joven de 22 años y la necesidad de asistencia de otras 40 personas. Ocho de ellas por el CICU en el lugar y 32 que fueron trasladadas a hospitales. Cinco de ellas tuvieron que ser hospitalizadas a causa de las fracturas que presentaban, siendo la de mayor gravedad la de una joven de 19 años en la columna vertebral.