Bosé ha presentado los Bosé QuietComfort 2, unos auriculares de tipo in ear con un sistema de cancelación de ruido de lo mejor que puede verse en el mercado. Lo malo, su precio: cuestan 319 euros.
Es cierto que el coste es alto, pero no se puede pasar por alto que la calidad de su cancelación está a la altura, sino por encima, de la de equipos de diadema, en los que a la cancelación activa hay que sumar la de tipo pasivo a través de las almohadillas.
En la rueda de prensa de presentación del producto la compañía repitió varias veces que eran "los auriculares con la mejor cancelación de ruido del mundo". Justificaban esta afirmación en un estudio independiente en el que se analizaron los diez auriculares -in ear y de diadema- con mejor cancelación de ruido del mercado. El Bosé QuietComfort 2 fue el que salió mejor parado, según asegura la compañía. En la comparativa se encontraban también los Sony WH-1000XM4, considerados por muchos los auriculares con mejor cancelación del mercado.
Lo cierto es que los Bosé QuietComfort 2 están a la altura, incluso por encima, del equipo de la enseña japonesa. Sorprende, y mucho, el sistema de aislamiento. Es ponerse los auriculares y 'apagarse' el ruido exterior prácticamente al completo. Hay frecuencias en las que no funciona tan bien -caso del tecleo del ordenador-, pero en líneas generales la cancelación es de diez.
Su autonomía es de seis horas y con el estuche en el que se guardan se pueden cargar hasta tres veces, lo que aumenta la cifra hasta las 24 horas. Por otra parte, con 20 minutos de carga se obtienen dos horas de reproducción
En Vozpópuli los hemos probado tanto en avión como en un tren, entornos con mucho ruido en los que se ha comportado de forma ccorrecta, reduciendo el ruido a niveles casi imperceptibles. La cancelación, piedra filosofal de este equipo, es un acierto y coloca el listón muy alto para futuros lanzamientos. Como sucedió en su día con los Sony WH-1000XM4, se puede decir que se ha creado otra categoría de producto. El salto de calidad en el sistema ANC (Active Noise Cancelling, cancelación activa del ruido en inglés) es abismal en el modelo que nos ocupa.
La tecnología CustomTune permite a cada auricular reconocer las particularidades de cada oído de forma independiente. A través de la aplicación móvil de Bosé, es posible también detectar de forma automática si tenemos la goma de silicona adecuada a nuestro oído y los auriculares bien colocados.
La autonomía de estos auriculares
El nivel de cancelación dispone de varios modos: silencio, alerta, hogar, música, relajación, etcétera. Son resistentes al sudor (IPX4) y ofrecen un nivel de sujeción muy bueno. Su autonomía es de seis horas y con el estuche en el que se guardan se pueden cargar hasta tres veces, lo que aumenta la cifra hasta las 24 horas. Por otra parte, con 20 minutos de carga se obtienen dos horas de reproducción.
En cuanto al sonido, tan solo le dedicaremos este párrafo -su elemento diferencial es la cancelación de ruido-. Está a la altura de lo que ofrece Bosé, con graves siempre presentes y agudos en la misma medida; brindando una escucha equilibrada, sin que ninguno de estos dos parámetros predomine sobre el otro. Además, es posible personalizar la ecualización desde su app.
El punto negativo está, además de en el precio, en las dimensiones de la caja de almacenamiento. Molestan cuando se llevan en el pantalón vaquero si comparte espacio con llaves, móvil o cartera, elementos habituales en el bolsillo. Y eso que tanto el peso como las dimensiones de caja y auriculares se han reducido respecto a la versión anterior.
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