Se cumplieron los presagios. La indudable 'burbuja' de las plataformas de 'streaming' está provocando una desmesurada oferta que está afectando ya a quienes parecían invencibles. El claro ejemplo es Netflix, un gigante audiovisual -a día de hoy sigue siendo el que más suscriptores tiene- que se ha visto obligado a crear nuevas ofertas más económicas con publicidad para tratar de salir a flote.
Hacía tiempo que la compañía de Reed Hastings planteaba implantar un nuevo plan entre sus opciones que incluyese publicidad para así abaratar el precio -además de otras opciones para no dejar de ganar suscriptores-. Ha sido este jueves cuando, finalmente, se ha consolidado la noticia. A partir del próximo noviembre, Netflix lanzará una suscripción a 5,49 euros (6,99 dólares) con anuncios en varios lugares del mundo -un total de 12 países-, incluido España, a donde llegar el día 10.
Esta nueva oferta contará con la mayoría de las funciones del plan básico de Netflix (7,99 euros al mes), pero con diferencias. Según la compañía, habrá una media de 4 o 5 minutos de anuncios por hora de un máximo de 20 segundos antes y durante los contenidos. Asimismo, la resolución máxima será de 720 p/HD (los planes superiores tienen Full HD y Ultra HD).
La mayor diferencia, además de los anuncios es que, de momento, el nuevo plan tendrá un número limitado de películas y series no disponibles debido a restricciones de licencias y en lo que la plataforma promete estar trabajando. Tampoco se podrán descargar los contenidos para verlos 'off-line'.
Nueva tarifa de Netflix con anuncios
Fue a mediados de julio cuando Netflix anunció su alianza con Microsoft para desarrollar la nueva modalidad de suscripción. Un mes después era otro gigante, The Walt Disney, el que informaba de que su plataforma de 'streaming', Disney+ la que abrirá un nuevo plan con publicidad y otra opción sin publicidad a un precio más alto, de momento solo en EEUU.
Tras el anuncio de Netflix y el posterior de Disney+ llegó el de HBO, que ya bajo el nombre de HBO Max -contando con las marcas más populares de WarnerMedia- baraja crear una gran plataforma junto a Discovery+, en la que se ofrecerá también un plan con anuncios. En este caso, la modalidad sería gratuita, aunque no se conocen demasiados detalles al respecto.
Suben los precios de las plataformas
Todo ello, sumado al incremento de precios de la mayoría, apunta a que la burbuja del 'streaming' hace que las plataformas tengan que buscar alternativas para seguir siendo rentables. Esto no implica que hayan dejado de serlo, pero tal y como muestra en sus resultados de los últimos meses Netflix, las cosas ya no van tan bien.
Esta última decisión aterriza tras una pérdida de competitividad en el mercado: encadena caídas de suscriptores, se ralentiza su ritmo de crecimiento, se producen reducciones de plantilla y los inversores no están contentos ni con esto ni con las predicciones de los analistas.
Netflix perdió casi un millón de suscriptores (970.000 cuentas) durante el segundo trimestre del año, periodo en el que obtuvo unos beneficios netos de 1.441 millones de dólares (unos 1.478 millones de euros), desveló la compañía el pasado 19 de julio, tal y como publicó 'Vozpópuli'.
Según el gigante audiovisual, la transición de la televisión tradicional al 'streaming' es cada vez más rápida, aunque tal y como muestra la CNMC, en España los ingresos de televisión de pago cayeron un 2,9% en el primer trimestre, alcanzando una facturación de 496,8 millones, mientras la televisión en abierto creció un 3,3% interanual, con unos ingresos de 344,3 millones.
Con este panorama son muchas las teorías sobre qué ocurrirá en el saturadísimo mercado audiovisual en un futuro a medio largo plazo. La estrategia de Netflix podría ser, como la misma empresa asegura, con el objetivo de llegar a todos los públicos y a gente que no puede permitirse pagar tanto todos los meses. Sin embargo, todo apunta a que los resultados no benefician a la compañía y tiene que buscar alternativas para seguir siendo rentable y sobrevivir.
Netflix, ¿tratando de ser el favorito?
No obstante, tal y como señalan algunos los expertos, esta sí podría ser, siguiendo la línea de lo que defiende la propia empresa, un as en la manga de Hastings para atraer a usuarios. A día de hoy es casi imposible lidiar con toda la oferta de plataformas -solo en España hay más de una decena de plataformas 'grandes'- y, por ello, Netflix puede estar aprovechando que muchos usuarios deberán elegir alguna de ellas para bajar su precio y posicionarse como el favorito, aunque tenga anuncios.
Lo que está claro a día de hoy es que ya tres gigantes como son Netflix, Disney+ y HBO están plateando o han incluido publicidad en sus contenidos, algo impensable hace años. Era la principal distinción de este tipo de plataformas de la televisión tradicional. Ahora, si quieren recuperarse del batacazo, parece que se deberán sumar a ingresar gracias a la publicidad.
Si finalmente el mundo audiovisual tira de fusiones, Amazon y Apple son dos claras candidatas a 'comerse' al resto.
Pero no todas. Hay dos gigantes que aún no tienen problemas de solvencia gracias, en gran parte, a que no son compañías únicamente audiovisuales. Lo cierto es que Jeff Bezos cambió el rumbo del mercado conocido. Asociando su comercio electrónico mundial con un servicio de cine y series, convierte a su producto en más que rentable y atractivo. Este es el caso de Amazon Prime Video. Tampoco se queda atrás Apple, que gracias a su ingente negocio de tecnología, su plataforma Apple TV+ puede seguir en el mercado.
Amazon y Apple y las posibles fusiones
El grupo de Big Tech lo forman Alphabet, Amazon, Apple, Meta Platforms, Microsoft, Netflix y Tesla, que en conjunto han logrado un valor de unos nueve billones de dólares, aunque en lo que va de año han perdido tres billones.
Sin embargo, Amazon fue la segunda empresa de EEUU que alcanzaba el valor del billón de dólares en Bolsa (en 2018) -a día de hoy está valorado en 1,3 billones-. Apple, por su parte, se convertía en enero de este año en la primera compañía del mundo en superar los tres billones de dólares de valor en Bolsa. Así, si finalmente el mundo audiovisual tira de fusiones, estas son dos claras candidatas a 'comerse' al resto.
