La pasada semana, Anette Falcón, del Movimiento Reunificacionista de Puerto Rico, se hizo viral por reivindicar que su país volviese a formar parte de España. La 18ª comunidad autónoma del país para recuperar la riqueza y el estatus que tenían entonces. Esta reividicación, pese a lo mucho que se compartió el vídeo, no es nueva. De hecho, en el siglo XIX ya hubo movimientos que buscaban este objetivo en países como República Dominicana o Chile tras lograr la independencia.

Si en Puerto Rico siempre hubo pensadores que defendían ser una comunidad autónoma de España, la pobreza derivada de ser un Estado Libre Asociado a Estados Unidos intensificó a principios de este siglo el interés. Al fin y al cabo, el país depende de las ayudas federales norteamericanas para sostener su sistema. Pero no fue hasta el huracán sufrido en la isla durante 2010, tras el cual Estados Unidos se desentendió, que comenzó a forjarse un movimiento político real en el país.

En 2012 se produjeron los primeros encuentros y en 2014, los reunificacionistas se convirtieron en asociación. Ese mismo año nació la propuesta más seria, el Movimiento de Reunificación con España, con unos objetivos políticos mucho más claros que se llevaron también a la calle. Pero con el paso de los años, sus reivindicaciones cayeron en saco roto hasta la llegada de Adelante Reunificacionistas, la asociación a la que pertenece Anette Falcón.

Aunque el vídeo se ha hecho muy viral en España, lo cierto es que los reunificacionistas son una minoría residual en Puerto Rico. Con cierto peso en redes socialistas, aquellos que reivindican un plebiscito para volver a pertenecer a España están lejos de convertirse en un partido político que pueda lograr el objetivo. "Mientras ellos (Estados Unidos, Brasil o Canadá) se unieron, a nosotros nos balcanizaron", reza una de las proclamas de los reunificacionistas.

De hecho, el debate puertorriqueño se encuentra en otro punto: ser independiente o convertirse en estado de todo derecho de Estados Unidos para abandonar así el estatus de Estado Libre Asociado que mantiene a Puerto Rico en tierra de nadie.

Misma situación se vive en República Dominicana, donde también hay asociaciones que piden un plebiscito para saber si quieren volver a pertenecer a España. El objetivo sería tener una autonomía como la que posee Canarias, aunque como sucede en Puerto Rico, es un movimiento con poca repercusión que gana adeptos.

En el caso de Cuba, el movimiento Autonomía Concertada no nació en la isla, sino en Francia durante el año 2012. El fundador fue Ferrán Núñez, un escritor y activista que se exilió en Francia después de ser expulsado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba por mostrar "desafecto al proceso revolucionario e incompatibilidad moral". En Cuba, por encontrarse en una dictadura, cualquier tipo de movimiento político que sea distinto al propuesto por el régimen no es aceptable.

En el caso de esta asociación, primero busca recuperar el derecho a recuperar la nacionalidad española, ya que muchos cubanos la perdieron en 1898 en el Tratado de París, el cual consideran ilegal según el derecho. Una vez logrado, el objetivo es llevar a cabo un plebiscito que permita a Cuba convertirse en comunidad autónoma. Pero ni la situación política actual del país ni la gente está pensando en ello, con el pueblo cubano sumido en una lucha por la supervivencia.

De este modo, aunque en España hay ciertos movimientos independentistas que buscan su separación de España, al otro lado del Atlántico hay activistas que buscan exactamente lo contrario: recuperar su estatus como ciudadanos españoles con el ansia de recuperar el esplendor económico y social con el que contaron como extensión de España.

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