¿Se acabaron los sobrecillos de azúcar en los bares y restaurantes? La entrada en vigor de una serie de normativas europeas que buscan limitar el uso de plástico en los envases ha provocado varias modificaciones en los productos. Uno de los claros ejemplos son los tapones, que en la gran mayoría de casos no se puede separar del envase para evitar que estos no se reciclen, algo que antes era muy habitual. Aun así, desde el Parlamento Europeo se ha dado el visto bueno a una serie de medidas de actuación para tratar de hacer frente al impacto del plástico dentro de Europa.
Según los informes de los expertos, la media de cafés que se toman habitualmente en España es de 3,6 tazas diarias entre semana. En los fines de semana, en donde la necesidad de un chute de cafeína no es tan necesario, el consumo se reduce a 2,7 cafés al día. Evidentemente, España no es de los países que están en el top 3, pero la cantidad de consumo de esta bebida es considerable.
Adiós a los sobres de azúcar
Una de las maneras más usuales de tomar café es en nuestro bar de confianza, además de que un alto porcentaje de personas se lo piden para cerrar con broche de oro una comida con la familia o amigos. Dentro de esta práctica tan recurrente, el romper el sobre de azúcar y echar el producto para endulzar el sabor amargo del café forma parte del ritual de tomar café lejos de nuestra casa. Pues todo indica a que los sobres tal y como los conocemos tienen los días contados.
"En 2021, la UE generó un volumen total estimado de 84,3 millones de toneladas de residuos de envases, un aumento del 6,0 % (o 4,8 millones de toneladas) en comparación con 2020. El crecimiento en 2021 se debió principalmente a un aumento de los residuos de envases de madera. en 2,3 millones de toneladas (+19,0 %). También se ha producido un aumento notable de los residuos de envases de papel y cartón respecto a 2020, con un aumento de 1,3 millones de toneladas (+3,9 %). Los aumentos en el material de desecho fueron menores en los envases de plástico (hasta 598 mil toneladas; 3,9 %), vidrio (hasta 467 mil toneladas; 3,1 %) y metal (hasta 181 mil toneladas; 4,5 %)", explica Eurostat en un estudio publicado sobre la cantidad de envases de plástico que se producían en Europa.
La fecha de retirada en bares y restaurantes
Antes de entrar en el quid de la cuestión, la Unión Europea estableció una serie de objetivos que se han planteando para crear una economía circular y así reducir los gases de efecto invernadero:
- El diseño de los plásticos y de los productos que contienen plástico deberá permitir una mayor durabilidad, la reutilización y un reciclado de alta calidad. En 2030, todos los envases de plástico comercializados en la UE deberán ser reutilizables o tendrán que poder reciclarse de un modo rentable.
- Los cambios en la producción y el diseño deberán ofrecer porcentajes de reciclado de plástico más altos para todas las aplicaciones clave. En 2030, más de la mitad de los residuos de plástico generados en Europa deberán ser reciclados. La recogida separada de estos residuos tendrá que alcanzar niveles muy altos. El reciclado de los residuos de envases de plástico deberá alcanzar niveles comparables a los de otros materiales de envasado.
- La capacidad de reciclado de plásticos en la UE deberá ampliarse y modernizarse sobremanera. En 2030, la capacidad de selección y reciclado deberá cuadruplicarse con respecto a los niveles de 2015, lo que creará 200.000 nuevos puestos de trabajo en toda Europa 19.
- Gracias a la mejora de la recogida selectiva, la inversión en innovación y el incremento de las cualificaciones y las capacidades, las exportaciones de residuos plásticos mal clasificados se eliminarán progresivamente. El plástico reciclado se convertirá progresivamente en una valiosa materia prima para la industria europea y del resto del mundo.
- La cadena de valor del plástico deberá integrarse mucho más y la industria química deberá trabajar en estrecha colaboración con las empresas de reciclado de plástico y ayudarlas a encontrar aplicaciones más amplias y con mayor valor para su producción. Las sustancias que obstaculizan el proceso de reciclado deberán sustituirse o eliminarse progresivamente.
- Deberá establecerse un mercado para plásticos reciclados e innovadores que funcione adecuadamente y con perspectivas de crecimiento claras, ya que cada vez más productos incorporarán una parte de contenido reciclado. La demanda de plástico reciclado en Europa deberá cuadriplicarse, ofreciendo un flujo estable de ingresos al sector del reciclado y seguridad en el empleo a su creciente mano de obra.
- Un mayor reciclado de plásticos contribuirá a reducir la dependencia de Europa con respecto a las importaciones de combustibles fósiles y las emisiones de CO2, en consonancia con los compromisos asumidos en el marco del Acuerdo de París.
- Se desarrollarán y utilizarán materiales y materias primas innovadores y alternativos para la producción de plástico cuando se haya probado claramente que son más sostenibles en comparación con las alternativas no renovables. Esto apoyará los esfuerzos de descarbonización y creará nuevas oportunidades de crecimiento.
- Europa deberá confirmar su liderazgo en equipos y tecnologías de clasificación y reciclado. El aumento de las exportaciones deberá ir a la par con la demanda mundial de formas más sostenibles de tratamiento de los plásticos que lleguen al final de su vida útil.
Es por ello que, de cara al 2030, lo más probable es que los sobres de azúcar que pongan en los bares y restaurantes para acompañar el café se vean modificados por esta serie de retos que se han planteado desde la Unión Europea. Unas medidas que se empezarán a hacer latentes con el paso de los años y que se espera que tengan un efecto positivo en la reducción de gases de efectos invernaderos, todo esto sumado a toda una serie de leyes para cuidar nuestro planeta y mejorar la atmósfera a nivel europeo.
Stephen Dedalus
Es todo una G*L*P*LL*Z de tal envergadura que me da hasta vergüenza leerlo y pensar que habrá cientos de *MB*C*L*S que se lo crean.