En España, más de 3,5 millones de autónomos trabajan día a día por sacar adelante sus empresas -en su mayor parte PYMES, y el mayor sustento de la economía del país-. Ahora, ellos también pueden acceder a la ayuda familiar, un subsidio de 480 euros al mes que puede suponer la diferencia entre llegar a fin de mes o pasar auténticas dificultades.
La ayuda familiar es una ayuda destinada a aquellos, además de contar con cargas familiares, no tiene acceso a la prestación por desempleo. Pero estos no son los únicos que pueden solicitar estos 480 euros: los autónomos también pueden hacerlo.
Requisitos para pedir la ayuda familiar
Hay dos requisitos comunes para poder solicitar la ayuda familiar, tanto en el caso de los autónomos con de los trabajadores por cuenta ajena.
- Haber agotado la prestación por desempleo o no poder acceder a ella.
- Tener cargas familiares.
Además de esto, hay otro punto que se debe cumplir si se quiere optar a esta subvención: la media de ingresos familiares por persona inferior al 75% del salario mínimo. Pero, ¿qué es considerado como carga familiar? Además de tener hijos, las personas casadas dependientes económicamente de su cónyuge también pueden solicitar la ayuda.
Condiciones especiales
La ayuda familiar es de 480 euros mensuales, y puede llegar a prolongarse hasta un máximo de 30 meses -en función de cada caso y situación particular-. La ayuda se debe renovar cada 6 meses, pero hay algunos requisitos especiales para los autónomos.
- Debe haber pasado mínimo un mes desde el último paro.
- Para solicitar la ayuda: se utiliza un modelo de solicitud oficial del SEPE.
- Ser demandante de empleo durante un mes desde que se ha agotado la prestación.
Finalmente, es importante recalcarlo. Aunque muchos no lo sepan, los autónomos tienen el mismo derecho a la ayuda familiar que el resto de trabajadores por cuenta ajena.
