La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha intervenido en siete incendios forestales durante la actual campaña de lucha, en la que el número de fuegos y la superficie quemada están por debajo de la media de la década, mientras que la previsión es que la situación continúe siendo moderada.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha visitado este sábado las instalaciones de la UME en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid), donde ha sido informada por los cinco batallones de las actuaciones efectuadas desde el inicio de la campaña, que arrancó el 1 de junio y culminará el 30 de septiembre.
La UME ha desplegado hasta 880 militares y 274 vehículos en las siete intervenciones que ha hecho en esta campaña. Tres han sido en incendios forestales en campos de maniobras, los de Chinchilla (Albacete), Los Alijares (Toledo), y Cerro Muriano (Córdoba), con operaciones con 241, 19, y 119 militares, respectivamente.
También ha intervenido en cuatro incendios forestales a solicitud de tres comunidades autónomas. La Unidad respondió con 120 militares y 40 vehículos al fuego ocurrido en Valverdejo (Cuenca), del 30 de julio al 1 de agosto; 133 militares acudieron además a extinguir el incendio de Benasau (Alicante), que ocurrió en el mismo periodo.
Además, la UME se desplegó en Toledo para responder al incendio forestal de La Estrella con 129 militares y 40 vehículos del 6 al 7 de agosto, y en la comunidad autónoma de Aragón se desplegaron 119 militares con 36 vehículos para extinguir el fuego de Corbalán (Teruel), del 11 al 13 de agosto.
En el exterior, la UME ha participado en dos despliegues en Bulgaria por el 43 Grupo de Fuerzas Aéreas del Ejército del Aire y del Espacio, como equipo de enlace y asesoramiento en las operaciones derivadas del Proyecto RescEU.
Los jefes de los batallones de intervención y los subgrupos tácticos han detallado a Robles los dispositivos y han coincidido al señalar la sintonía y el trabajo en común con las comunidades autónomas, reconociendo que algunas, como Aragón, han recurrido a activaciones rápidas.
La UME ha explicado que la mayor humedad del combustible vegetal ha permitido reducir el número de incendios y su virulencia porque los vividos han sido de viento, y no convectivos, incendios de sexta generación que tienen muchos frentes, que dificultan la extinción.
Sobre esta campaña, los militares de la UME han destacado además que se estén produciendo muchos incendios provocados en Ávila, de los que ha alertado la comunidad autónoma, o la detención de tres pirómanos en Canarias, donde se han producido también menos incendios de lo esperado.
La ministra de Defensa ha celebrado que los incendios hayan sido menos gravosos y ha destacado el trabajo de prevención y disponibilidad de la UME, que cuenta en esta campaña con 1.400 militares en ataque directo al fuego y 1.500 militares en funciones de apoyo logístico, según los datos facilitados por el ministerio.
Lucalobo
Debe ser cosa del cambio climático .....