España contará en 2066 con más de 14 millones de personas mayores de 65 años, el 35% del total, casi el doble que en la actualidad (8,7 millones, según el INE), un escenario en el que se espera, además, que haya cinco millones y medio de habitantes menos.
Así lo revela el estudio 'Evolución de la situación de las personas mayores en España', elaborado por varios investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que dibuja, a través de una serie de indicadores demográficos, de salud, económicos y sociales se dibuja, la evolución de la situación de las personas mayores en España.
Según este informe, España "continúa su proceso de envejecimiento". Según los datos del Padrón Continuo (INE) a 1 de enero de 2017 hay 8.764.204 personas mayores, un 18,8% sobre el total de la población (46.572.132).
Los autores del estudio sostienen que crece en mayor medida la proporción de octogenarios, que ahora representan el 6,1% de toda la población, y que seguirán ganando peso, y sexo predominante en la vejez sigue siendo el femenino, ya que hay casi cinco millones (4.995.737) de mujeres mayores frente a 3.768.467 hombres.
Además, advierten de que para el año 2066, de seguir todo así, se habrá cinco millones y medio menos de personas en España: Los niños y la población en edad laboral habrán reducido su peso y los mayores triplicarán la cifra de niños.
Envejecimiento de la población rural
El documento señala que el envejecimiento de la población es mucho más acentuado en el mundo rural, donde viven algo más de 2,5 millones de personas en los municipios rurales, de las que el 28% son personas mayores.
Un dato que para los investigadores llama la atención es que, igual que la España rural va vaciándose de jóvenes y adultos, también empieza a perder personas mayores porque su edad media es muy alta y se van registrando más fallecimientos.
Con respecto a la posición económica de los mayores, el informe apunta a que esta ha mejorado relativamente en los últimos años y su tasa de riesgo de pobreza se sitúa en 13%, inferior a la del resto de los españoles.
Las personas mayores han evitado lo peor de la crisis económica iniciada en 2008, pero desde 2015 aumenta de nuevo su riesgo de pobreza, mientras que el estado de salud indica que, en 2016, las mujeres españolas tienen una esperanza de vida al nacer de 85,8 años, y los hombres de 80,3 años (INE), "lo que nos sitúa entre las más altas de Europa y del mundo, y la tendencia general indica un crecimiento continuado", apuntan.
Más longevas pero más solas
Este incremento también se observa en la esperanza de vida a los 65 años: Las mujeres destacan por tener una esperanza de vida mayor que los hombres, pero su esperanza de vida saludable es menor (9,5 y 10,1 años, respectivamente), por un aumento de la morbilidad y una mayor supervivencia.
"La edad aumenta la posibilidad de vivir en soledad", sostienen estos investigadores, que observan un incremento en los últimos años de los hogares unipersonales. En España, tres de cada cuatro mayores que viven solos son mujeres.
Aunque son ellas las que cuidan con mucha mayor frecuencia de los hombres, estos expertos observan un ligero cambio, pues se ha detectado que aumenta algo el tiempo de cuidado prestado por los hombres, en especial el de los hombres mayores.
En 2016, la principal causa de muerte entre los mayores está relacionada con enfermedades del aparato circulatorio, que provocaron 109.096 fallecimientos; el cáncer (tumores) es la segunda causa de muerte (85.881 fallecidos), y a mucha distancia se encuentran las muertes por enfermedades respiratorias (43.898 fallecidos). Destaca el aumento de la mortalidad por enfermedades mentales y nerviosas en los últimos lustros.