El inclumplimiento de las responsabilidades fiscales se ha convertido en un tema de actualidad. Día tras día personajes públicos de cualquier índole son objeto de noticia por tener las denominadas sociedades 'offshore' en paraísos fiscales con el propósito de desviar fondos y evitar pagar los impuestos correspondientes en España.
Sin embargo, hay un sector en el que los nombres suenan y resuenan, pero las consecuencias penales no terminan de arrancar. El deporte rey por antonomasia tiene protagonistas que no lo son tanto por marcar goles o ganar balones de Oro. Tiene protagonistas que se encaran como mejores jugadores del mundo o se disputan ser el pichichi de la Liga Española de Fútbol, no obstante, no es en lo único en lo que compiten. Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, presuntamente, han defraudado a Hacienda cantidades desorbitadas. Pero, ¿qué se podría haber hecho en España con ese dinero no declarado?
El argentino es condenado a 21 meses de prisión por el fraude de 4,1 millones de euros. Al portugués se le calculan 15 millones
Al argentino se le ha confirmado recientemente –el pasado 24 de mayo- una condena ejemplar de 21 meses de prisión por el fraude de 4,1 millones de euros a Hacienda. No ingresará en prisión por tratarse de menos de dos años, pero lo que parece claro es que Messi defraudó esa cantidad. Ronaldo no se queda atrás. El pasado diciembre comenzaron a salir a la luz datos del portugués en los que se le incluía en los denominados Football Leaks –'El Mundo'- y en los que se leía que el galáctico merengue habría dejado de pagar 15 millones de euros a las arcas del Estado. En este caso, la Fiscalía aún no ha dado dictamen de si hay delito o no en los actos del portugués.
España podría haber invertido esos millones de euros en numerosos factores. Desde las propias familias que luchan cada día por poder llevar a sus hijos al colegio o los jóvenes que tienen que elegir entre trabajar o estudiar en la universidad por el precio de la matrícula hasta las becas comedor o las largas listas de espera congeladas que sufren los que necesitan ayudas en dependencia.
Los colegios públicos españoles tienen una tasa de admisión que ronda los 500 euros de media, si no se tienen en cuenta el transporte o el comedor. El dinero defraudado por Messi les valdría a 8.200 familias para llevar a los más pequeños al colegio un año. Y aún 1.366 familias podrían hacerlo durante su etapa de Primaria. Si se cuentan el comedor –de media 90€/mes- y el transporte –de media 50€/mes-, 3.129 familias tendrían cubierto un año escolar con comedor y 1.814 lo tendrían con la alimentación y el transporte. Si hablamos del caso de Ronaldo, las cifras se disparan aún más: 30.000 niños podrían matricularse en el colegio un año; 5.000 tendrían cubierta la etapa de Primaria; 11.450 tendrían colegio y comedor; y 8.522 pequeños tendrían educación, comedor y transporte durante un año.
En el caso de las guarderías, 20.500 padres y madres podrían matricular a sus hijos doce meses con el dinero defraudado por Messi; con el de Ronaldo, 75.000. En la enseñanza superior, 3.693 estudiantes podrían matricularse en la universidad con la primera cifra – la matrícula media en España es de 1.110 euros-; 13.513 lo podrían hacer con la cantidad del merengue. En el caso de los más longevos, la pensión media atribuida en España es de 1.046,28 euros al mes, por lo que, 326 personas tendrían su pensión cubierta durante un año con lo defraudado por el del Barça. Con el dinero de Cristiano, lo harían 1.194 jubilados. Finalmente, si nos centramos en la Ley de Dependencia y tenemos en cuenta la prestación por cuidados en el entorno familiar con un cuidador dado de alta en la Seguridad Social, lo de Messi daría para 701 de estas dotaciones, lo de Ronaldo, para 2.566.
Si se cambia de sector, en cultura ese dinero también habría permitido a muchas personas disfrutar de discos de música, vinilos, entradas de cine o de música en directo o en entradas para el codiciado concierto de The Rolling Stones en España del próximo mes de septiembre. Con los millones presuntamente defraudados por Messi se podrían haber comprado 273.333 discos, 164.000 vinilos, 431.578 entradas de cine, 325.396 para deleitarse con música en directo o 48.235 de las entradas más baratas para los ingleses. Si contásemos con lo de Ronaldo: un millón de discos, 600.000 vinilos, más de un millón y medio de entradas de cine, más de un millón de entradas para música en directo y 176.470 entradas para los Stones.
Los datos hablan por sí solos. Para muchos, las cifras que se barajan cada día en el mundo del fútbol resultan astronómicas, pero más lo son cuando estos millones que deberían aportar algo a las arcas del Estado no lo hacen. La evasión de impuestos en paraísos fiscales se ha convertido en un hecho recurrente, los futbolistas de élite extranjeros pueden ampararse en la Ley Beckham, que permite desde 2007 tributar al 24,75% y no al 48% aplicado a las rentas altas de españoles. Aunque se han estudiado los millones presuntamente defraudados por ambos galácticos (4 y 15), lo cierto es que el primero no tributó un total de 10 millones de euros por derechos de imagen. Ronaldo, por su parte, desvió 150 millones a paraísos fiscales. Saquen sus conclusiones.
