Estados Unidos bombardeó esta noche, por orden de Donald Trump, la base aérea de Shayrat como represalia al ataque con armas químicas que acabó con la vida de unos 80 civiles este martes, la primera agresión directa de EEUU desde que comenzara la guerra civil. Las fuerzas militares estadounidenses lanzaron un total de 59 misiles de crucero desde dos de sus buques militares ubicados en el Mediterráneo para diezmar la capacidad de las fuerzas aéreas sirias.
Mientras, la OTAN ha responsabilizado al régimen sirio de Bachar Al Asad por el bombardeo estadounidense, al justificarlo como una reacción al supuesto ataque químico perpetrado esta semana contra la población civil. "El régimen sirio ostenta toda la responsabilidad de este desarrollo. La OTAN ha condenado consistentemente a Siria por el uso continuado de armas químicas como una clara violación de las normas y acuerdos internacionales", señaló en un comunicado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
Stoltenberg recordó que "cualquier uso de armas químicas es inaceptable, no puede ser ignorado, y los responsables deben rendir cuentas". "La OTAN considera el uso de armas químicas como una amenaza para la paz y la seguridad internacional", añadió. Al tiempo, subrayó que la OTAN "apoya todos los esfuerzos internacionales que busquen lograr una solución pacífica y política al conflicto.
La OTAN calificó de "horrendo ataque con armas químicas" el ocurrido en Jan Shijún, una localidad al norte de siria, en el que fallecieron más de 80 civiles, entre ellos una veintena de niños. Según confirmaron hoy a Efe fuentes aliadas, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, informó a Stoltenberg antes de que se produjera el bombardeo de la base aérea siria de Shayrat. "Podemos confirmar que el secretario general de la OTAN fue informado por el secretario de Defensa de Estados Unidos antes de los bombardeos", dijeron las fuentes.
En la línea de la reacción de la OTAN, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, han acusado al presidente sirio, Bachar al Asad, de cargar "en solitario con la responsabilidad" por el ataque con armas químicas del martes y por el subsiguiente bombardeo estadounidense.
El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, se ha unido a esta opinión afirmando que la Unión Europea (UE) fue informada del bombardeo de EEUU ayer contra Siria, circunstancia que "entiende" para evitar más ataques como el supuesto bombardeo del régimen de Bachar Al Asad con armas químicas contra población civil. "Juncker ha sido inequívoco en su condena del uso de armas químicas. El uso repetido de estas armas debe tener respuesta. Entiende los esfuerzos para impedir más ataques", señaló la presidencia de la CE en un comunicado.
En el mismo, indicó que Estados Unidos informó a la UE de que bombardearía una base aérea siria de Shayrat como represalia al supuesto ataque con gas sarín de Damasco que mató a unos 80 civiles. El ejecutivo comunitario subrayó que debe marcarse una "clara distinción entre los ataques aéreos contra objetivos militares y el uso de armas químicas contra civiles". Bruselas renovó su ambición de detener "la espiral de violencia en Siria y trabajar hacia una paz duradera". "Solo una transición política puede llevar a ese resultado. El presidente Juncker y la Comisión Europea en su conjunto están preparados para desempeñar su parte plenamente", concluyó la CE.
El Gobierno también ha considerado que el bombardeo de Estados Unidos contra una base militar en Siria "es una respuesta medida y proporcionada" a la utilización por el ejército sirio de armas químicas contra la población civil del país. En un comunicado, el Ejecutivo de Mariano Rajoy asegura que la operación estadounidense, ordenada por su presidente, Donald Trump, "es una acción limitada en su objetivo y medios" y añade que ha sido un ataque contra una base militar, "no contra objetivos civiles".
El Gobierno español afirma que el uso de armas químicas está prohibido por el derecho internacional y constituye "un crimen de guerra cuyos responsables deben ser conducidos ante la justicia". Y añade que la operación estadounidense sirve para "mermar las capacidades militares del régimen de volver a utilizar este tipo de armas contra su población".
El Gobierno, que mantiene una "sólida lealtad" con sus aliados, dice que es partidario de una "acción concertada internacional", por lo que lamenta que el bloqueo del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en el conflicto de Siria no lo haya hecho posible.
Así, hace un llamamiento para que se ponga en marcha cuanto antes un proceso político de transición, recogido en las resoluciones del Consejo de Seguridad. "Esa es la única fórmula que puede traer la paz definitiva a Siria y garantizar su integridad territorial. Es un proceso que debe ser dirigido por Naciones Unidas", añade.
"El martes el dictador sirio, Bachar Al Asad, lanzó un horrible ataque químico contra civiles inocentes. Usando un agente nervioso mortal, Asad ahogó las vidas de hombres, mujeres y niños indefensos. Fue una muerte lenta y brutal para muchos, incluso para bebés preciosos, en este bárbaro ataque", apuntó Donald Trump en una breve comparecencia.
El Gobierno ruso encabezó el rechazo, junto al de Damasco, al ataque contra Siria de Estados Unidos, que apoyaron sus aliados, entre ellos Israel, mientras que Pekín abogó por prevenir un mayor deterioro de la situación.