Cuando se pasa por una de esas temporadas (¿astenia primaveral?) en la que todo nos cuesta un trabajo desproporcionado y la pereza hace alarde de su inmenso poderío y de sus ansias expansionistas, tenemos mucho que celebrar. A menudo se nos escapa el heroísmo de las pequeñas cosas de la vida cotidiana. Pasa de incógnito. No en estos momentos en que hay que vencerse hasta para irse a la cama por la noche. La explosión de belleza de la naturaleza, contra nuestro ánimo decaído, es todavía mayor y más sonora y hasta nos hiere, con su luz, los ojos somnolientos. La vemos como es: apabullante. Por eso hay que entornar los ojos.

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El adanismo es el pecado original de la inteligencia. **** No me entristece la pena, porque es la prueba palpable de todo aquello que la merece. **** A la nada hay que volverle la espalda y mirarla, si acaso, por encima del hombro.**** Por mucho que se empeñen los elegíacos, la poesía afirma en su corazón y no se cansa de decirlo: «poe-sí-a».

He caído en desgracia con él, pero, como tampoco me tenía en tan alta estima, más que un batacazo, ha sido un brinco. **** Cualquier broma es imbatible: si no tiene gracia, tiene gracia. **** Honor se escribe con hache muda porque no pregona: hace.**** El mejor memento mori es proponerse una tarea que exceda nuestro tiempo, nuestras fuerzas y nuestro talento.

Escribir con lápiz: hacerlo sobre la arena. Escribir con pluma: en el agua. (Lo de teclear y tocar el piano ya lo dijo Gómez de la Serna). **** La burocracia: el gobierno de los muebles. ****Lo propio del noviazgo es la ilusión. Del matrimonio, la esperanza. La plenitud siempre aguarda un poquito más allá. **** Nada menos envidiable que la envidia; nada más admirable que la admiración.

Los aforismos miran la realidad de reojo, porque les gusta tanto que les da vergüenza

Ni lo uno ni lo otro. Los poemas que no se entienden a la primera son crucigramas. Y los poemas que se agotan en una primera lectura son viñetas. **** Hay que escribir poemas claros que vayan encendiéndose en sucesivas lecturas. **** El understatement me está hundiendo como humorista. **** Como el tiempo en los ascensores, la política en las columnas: es el tema de conversación por defecto. **** Cuánto le revienta al diablo que el infierno esté empedrado de buenas intenciones.

Otra ventaja importante de estar atento son esas muchas cosas que te pasan completamente desapercibidas. **** El honor es la vanidad redimida por el sentido del deber, el sacrificio y el buen gusto. **** El adanismo es lo más viejo del mundo. **** Con principios hasta el final. **** Tener otras muchas cosas que hacer sirve de sustitutivo de la paciencia. **** El oro es polvo, dice el ascético; y el polvo es oro, completa el místico, fascinado por ese símbolo del tiempo que ama los libros y el sosiego de los cuartos recónditos.

Yo no escribo para que me quieran, sino porque me quieren y no me lo merezco. **** El más barroco de los dolores es el de huesos. **** Un ejemplo evidente: los hijos ganan autonomía a medida que son más buenos y responsables. **** Luego nos acostumbramos a la sombra, pero las primeras hojas de un verde luminoso tienen la finura y la emoción de las flores. **** Los aforismos miran la realidad de reojo, porque les gusta tanto que les da vergüenza. **** Epitafio: "Creo que he sido feliz./ Dios me dirá si lo fui".

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