El Ballet Nacional de España (BNE), que este año celebra su 40 aniversario, ha desarrollado el primer videojuego inspirado en la danza española, "Bailando un tesoro", un proyecto que pretende difundir esa disciplina entre niños y niñas de 6 a 12 años y que se puede descargar gratuitamente.
Se trata de un proyecto "educativo", coordinado por Belén Moreno, que, según ha explicado hoy en declaraciones a Efe el director del BNE, Antonio Najarro, busca "captar la atención de los niños para que descubran que la danza española no solo es flamenco y que puedan experimentar y meterse en la piel de un bailarín".
"Bailando un tesoro" funciona con una técnica de juego sencilla, explica Najarro, en la que el jugador debe pulsar unos círculos que cambian de color y arrastrar una peineta para que los personajes interpreten los cuatro estilos de la danza española, el flamenco, la escuela bolera, la danza estilizada y el folclor.
Poco a poco estos personajes van pasando distintas fases inspiradas en escenarios reales como las aulas de ensayo del BNE hasta llegar a ser invitados a una representación en el Teatro de la Zarzuela de Madrid.
Disponible para IOS y Android
"Es una herramienta -disponible para IOS y Android- para que los niños conozcan la danza española bien porque quieran ser profesionales bien porque les guste disfrutarla como espectadores", ha explicado Belén Moreno, a quien en 2015 se le ocurrió la idea de crear el videojuego inspirado en el libro pedagógico de mismo nombre del BNE.
"Bailando un tesoro" ha sido desarrollado mediante tecnología Unity 3D por los tres ex alumnos de la Facultad de Informática de la Universidad Complutense Alejandro Romero, Manuel González y César Díaz-Faes, bajo la dirección del investigador especializado en videojuegos teatrales Borja Manero Iglesia.
Los pasos de baile de los personajes han sido creados por Najarro, quien se puso un traje de neopreno para interpretarlos a través de una herramienta de captura de movimiento.
"Fue muy divertido y al mismo tiempo sentía una gran responsabilidad porque el movimiento tenía que ser exacto y preciso", ha detallado.
En la narrativa, ideada por Clara Fernández, se inculcan los valores de la danza, "los componentes positivos para el desarrollo de una sociedad" como el respeto hacia el maestro, el sacrificio, el trabajo o la perseverancia.