Así que tampoco sorprende en exceso el anuncio de la nueva serie en la que está trabajando, pero sí deja volar una imaginación siempre presta a interpretar las señales del director italo-americano. La serie llevará por nombre Vinyl, tal y como se ha anunciado recientemente, y es un largo proyecto de la cadena HBO a cargo de Scorsese y nada menos que Mick Jagger, el eterno cantante de los Rolling Stones, y Terence Winter, creador de series como Boardwalk Empire.
Vinyl estará centrado en el día a día de un sello discográfico en el Nueva York de los años 70 y ofrecerá una especial visión de una época en que las drogas y el sexo estaban muy presentes en un rock y una música que ya vivía los nacimientos del punk y la música disco.
Uno de los grandes del rock hecho cine
Para revivir dichos años, en los últimos días los responsables de la producción han reconstruido un trasunto de dos históricas salas de conciertos neoyorquinas hoy ya desaparecidas: el Max's Kansas City y el CBGB. Por sus escenarios desfilaron lo más granado y vanguardista de la época, de The Velvet Underground a Iggy Pop, de Ramones a Alice Cooper, de Blondie a Bruce Springsteen.
La serie contará con la participación de conocidos actores del mundo del cine y la televisión, como Bobby Cannavale y Olivia Wilde, y otros menos conocidos pero no en cuanto a nombre, como el propio hijo de Mick Jagger, James, que interpretará el papel del cantante de la ficticia banda punk Nasty Brits.
No se puede negar que las expectativas son altas, no sólo por la habitual calidad de las series de la HBO, sino también por la participación de Jagger y el reconocido prestigio de Scorsese al tratar temas cercanos o directamente centrales de la historia del rock. Siempre quedará en nuestras retinas y oídos que ya en 1978 estrenó el que pasa por ser mejor documental/concierto en directo en la historia del rock, El Último Vals, sobre la actuación de despedida un par de años antes de uno de los grupos esenciales de la historia del rock americano como fueron The Band, en su momento banda de acompañamiento de Bob Dylan pero con una carrera a su nombre imprescindible.
Pero las cámaras de Scorsese, más allá de los guiños al rock en muchas de sus películas de género, también repasaron el blues en el proyecto colaborativo The Blues, el musical en New York, New York, al propio Bob Dylan en No Direction Home o a los Rolling Stones en Shine a Light, o la vida y obra de George Harrison en Living in the Material World. Y por encima de todo, no podemos olvidar que hablamos de uno de los más grandes en la historia del séptimo arte.