Pocos podrán negar a estas alturas de la película, nunca mejor dicho, la grandeza extrema de un director como Martin Scorsese. Su propia profesión así lo ha entendido, y ha ganado el Oscar de Hollywood, la Palma de Oro de Cannes, el León de Plata de Venecia, Grammy's, Emmy's, BAFTA's británicos, Globos de Oro, es el director con más nominaciones a los Oscar y, lo principal, reconocimiento mundial entre críticos y público en general. Y además, más allá de sus reconocidos frescos cinematográficos radiografiando la inmigración italiana en Estados Unidos, el nacimiento y las claves emocionales de la mafia o la propia sociedad americana, nunca ha estado demasiado lejos de la historia del rock y sus orígenes.