Los estudios cinematográficos de la Ciudad de la Luz pedirán este miércoles en una vista ante el Tribunal General de la UE (TJUE) no tener que devolver 265 millones de ayudas públicas recibidas de la Generalitat Valenciana y que la Comisión Europea declaró ilegales en mayo de 2012. El recurso de la Ciudad de la Luz cuenta con el respaldo de la empresa pública Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valencia, propiedad del Gobierno valenciano y del español.
Bruselas declaró ilegales las ayudas y ordenó su devolución alegando que "ningún inversor privado habría aceptado invertir (en la Ciudad de la Luz) en los mismos términos" que el Gobierno valenciano y que la financiación pública "distorsiona enormemente la competencia entre los principales estudios de cine europeos".
En el recurso que defenderá el miércoles ante el TJUE, la Ciudad de la Luz sostiene que "la Comisión yerra en su análisis del principio del inversor privado y en su conclusión sobre la existencia de ayuda de Estado". En este sentido, argumenta que las inversiones de la Generalitat Valenciana en el complejo "se adoptaron tras la elaboración de sendos planes de negocios que establecían la rentabilidad previsible del proyecto".
Además, denuncia que la Comisión se niega a tener en cuenta que junto a los estudios cinematográficos existía también el proyecto de desarrollo de una zona comercial y hotelera en terrenos circundantes, lo que haría que la rentabilidad de la Ciudad de la Luz fuera "aún mayor". Actualmente, la Ciudad de la Luz es un desierto cinematográfico, ya que lleva año y medio con su actividad paralizada, después también de conocerse que Generalitat la puso a la venta.
El cine no necesita dinero público
La investigación comenzó hace ya cinco años, en 2008, a raíz de las denuncias que recibió la Comisión Europea para determinar si la financiación que la Generalitat Valenciana concedía a la Ciudad de la Luz cumplía las normas europeas que regulan las ayudas estatales. En mayo de 2012, Bruselas determinó que la aportación pública "no se facilitó en condiciones de mercado”. Es justamente por esta razón que esta debía ser devuelta. Asimismo, la Comisión pudo en duda que la decisión de crear un nuevo centro cinematográfico cuando ya existen en Madrid y Barcelona respondiera a "razones comerciales".
Por aquel entonces, el comisario europeo de Competitividad, el español Joaquín Almunia, manifestó que el sector cinematográfico español es "dinámico y competitivo", por lo que no existía “ninguna necesidad de destinar dinero público a la financiación de un nuevo operador". Dar dinero público a unos estudios penaliza a los ya existentes y a aquellos que podrían entrar en el mercado y que no reciben estas ayudas, indicó entonces. "En el actual clima económico las consecuencias pueden ser desastrosas".
En el espejo de Terra Mítica
Por su parte, la diputada del PSPV en las Corts Eva Martínez aseguró que la Ciudad de la Luz "es el ejemplo claro de la economía del despilfarro y la corrupción que ha llevado a cabo el PP". Hace ya unos meses, el socialista Antonio Torres comparó la Ciudad de la Luz con Terra Mítica al entender que el PP había “usado fondos de Madrid y de la UE en actuaciones de dudosa rentabilidad y sin tener en cuenta la normativa", dijo refiriéndose al complejo de entretenimiento y parque de diversiones impulsado por el expresidente del PP Eduardo Zaplana en Benidorm quien este año ha presentado, por primera vez desde su apertura en el año 2000, un balance postivo.