Faltan quince días para que se celebren las segundas elecciones de una tanda de cinco para este 2015; cinco, claro, si contamos las del Fútbol Club Barcelona. Que este será un año electoral. Por eso, en estos días, se llenan la boca los candidatos en los periódicos y los programas de radio y televisión: toda una orgía promisoria y bienintencionada. Y sin embargo, un malestar se respira en el ambiente, acaso la idea cierta del naufragio: una clase media económicamente golpeada y el oleaje de reproches sobre unas élites; casta es ahora el adjetivo de la acusación, una especie de patata hirviente que pasa de unas manos a otras y que nadie quiere sujetar por mucho tiempo: quema y resta votos.
Casta es ahora el adjetivo de la acusación, una especie de patata hirviente que pasa de unas manos a otras
¿Qué significa tal cosa como ésa? ¿A qué se parece semejante tribu? ¿Cuántos y quiénes la representan? ¿Qué se ha escrito sobre ella? En el aluvión de ensayos políticos con el que editores y autores riegan las librerías en estos días, no faltan pocos libros al respecto: una bibliografía que comba las estanterías. Uno de esos libros ha sido, justamente el volumen que el británico Owen Jones dedica a las clases acomodadas del Reino Unido y que ahora Seix Barral publica en España con el título El Establishment: la casta al desnudo. En este ensayo el joven analista político realiza un viaje al corazón de la élite para analizar las similitudes entre el sistema de poder británico y el español.
Jones ve un "concepto similar" entre el término inglés "establishment" (clase dirigente) con el de casta, que utiliza para referirse a una "élite auto-engrandecida motivada por el interés propio" e integrada por una “oligarquía” compuesta por políticos, empresarios, banqueros, fuerzas policiales y medios de comunicación. ¿El objetivo común de unos y otros? Mantener el sistema actual de privilegios. No exento de una cierta candidez, Jones aporta una visión del mundo repartida como en el casting de un western: los buenos y los malos, los pobres y los ricos, poseedores y desposeídos…
Considerado por el Daily Telegraph como el séptimo autor más influyente del Reino Unido, Jones afirma que los integrantes de la "casta" son el principal impedimento para la verdadera democracia, porque "ignoran, demonizan o humillan" a quienes parecen "disentir de su statu quo" y se organizan de forma colectiva para frenar cualquier movimiento que "desafíe su riqueza y su poder". Nacido en Sheffield, Inglaterra, en 1984, Jones estudió Historia en la Universidad de Oxford y colabora en la actualidad en televisión y en medios británicos como The Guardian, The Independent y New Statesman.
El británico Owen Jones ve un "concepto similar" entre el término inglés "establishment" (clase dirigente) con el de casta
Con el "best seller" internacional Chavs: La demonización de la clase obrera, Jones revolucionó a la opinión pública en 2011 al abordar lo que, según muchos, supone el panorama de la lucha de clases existente en el Reino Unido y la desigualdad creciente que se reflejaba en el rechazo hacia las clases trabajadoras del país. Le toma el testigo Guy Standing con El precariado. Una nueva clase social, una categoría en la que queda retratada una clase masiva emergente a la que se le han negado derechos políticos, civiles, sociales y económicos, y que vive caracterizada por una creciente inseguridad legal y civil. De una naturaleza cada vez más global, asegura Standing, el precariado se ha convertido en un fenómeno social, reivindicado por movimientos como Occupy Wall Street o el 15M.
Completa la entrega el ensayo La casta. De cómo los políticos se volvieron intocables, un volumen escrito por los italianos Gian Antonio Stella y Sergio Rizzo que ha sido editado en España por Capitán Swing con prólogo de Íñigo Errejón e introducción de Enric Juliana. Fenómeno de ventas en Italia en 2008, este ensayo pretende ser una “fotografía sarcástica” de la situación político-institucional italiana. En sus páginas, se retrata a una “aristocracia inamovible y transformista”. ¿Cuáles son los rasgos de esa instantánea? El elevadísimo e injustificado coste de los políticos, los innumerables casos de corrupción, nepotismo, clientelismo, abuso de poder, despilfarro y financiación abusiva de los partidos.
“La clase dirigente se ha transformado en una clase de intocables”, aseguran sus autores, personas ávidas de usufructuar de los privilegios estatales y acrecentarlos de forma continua. Pero La Casta también alerta sobre los peligros del mal humor colectivo: en plena crisis de credibilidad de la política nacional, el sentimiento antipolítico es el dominante, afloran salvadores populistas y los periódicos extranjeros apenas se interesan por las figuras más mediáticas, como Beppe Grillo.
El ensayo La casta, editado por Capitán Swing, también alerta sobre los peligros del mal humor colectivo...
Pero no sólo Europa aporta malestar. Estados Unidos lleva lo suyo con El desmoronamiento, un libro editado hace ya unos meses por Debate y en el que el escritor y periodista norteamericano George Packer retrata a una superpotencia a punto de derrumbarse, con elites que ya no son elite, instituciones que ya no funcionan y la gente corriente abandonada a su suerte. La historia narrativa y caleidoscópica de la nueva América y en la que su autor se vale de historias personales con perfiles biográficos con los cuales proyectar un inmenso fresco que a nadie ha dejado indiferente.
Caso con una visión más global, toca mencionar Cuando los hechos cambian, una selección de los textos esenciales del filósofo Tony Judt que permanecían hasta ahora inéditos en español. Publicado por Taurus, el título del libro alude a una cita hasta ahora atribuida a John Maynard Keynes: "Cuando los hechos cambian, cambio de opinión. ¿Usted qué hace, señor?". El desencanto de Occidente tras el fin de la Guerra Fría, el imperialismo estadounidense o el desmantelamiento del Estado del bienestar… Son esos algunos de los temas que resuenan, vigentes -como nunca- en las páginas de este volumen. Socialdemócrata convencido, tras una juventud de militancia izquierdista radical, Judt tuvo la firme convicción de los intelectuales comprometidos. Y así procuró actuar hasta el día de su muerte, para algunos demasiado prematura hace ya casi cinco años.