De las diez preguntas que originalmente tenía esta entrevista, César Antonio Molina sólo respondió siete. El Ex director del Instituto Cervantes y ex ministro de Cultura dice no hablar de política, tampoco de temas actualidad. No entra al trapo con la ley de mecenazgo ni con los aciertos o desaciertos del Secretario de cultura José María Lassalle. César Antonio Molina sólo habla de un tema. De uno solo. La Casa del Lector.
El proyecto se trata de un espacio de 8.000 metros cuadrados dedicado íntegramente a fomentar la lectura a través de la palabra, la imagen, el arte, conferencias, exposiciones y nuevas manifestaciones expresivas. Impulsada por la Fundación del editor, empresario y mecenas español Germán Sánchez Ruipérez, la Casa de Lector tiene previsto abrir sus puertas este otoño en el Matadero Madrid . Al frente del proyecto estará el ex ministro, escritor y ex director del Cervantes, quien habla –esta vez sí- sobre los alcances y objetivos de un proyecto que siembra expectativas en momentos de incertidumbre.
"Han sido 26 millones de euros de inversión privada lo que, con los tiempos que vivimos, es difícil de entender".
-Después de su paso por instituciones como el Círculo de Bellas Artes, el Cervantes y el Ministerio de Cultura, ¿cómo afronta este nuevo reto de La Casa del Lector?
-Como he afrontado todos los retos profesionales que he tenido: con ilusión, dedicación, trabajo y mucha responsabilidad.
- El lector es uno de lo ejes fundamentales de la cultura, pero también es cierto que es un gran olvidado. ¿Qué supone este proyecto? ¿Qué puede esperar el lector de la que será su casa?
-Casa del Lector supone la materialización de un proyecto que Germán Sánchez Ruipérez impulsó y que, desgraciadamente, no tuvo tiempo de ver realizado. Es la culminación en Madrid del proyecto que la Fundación Germán Sánchez Ruipérez lleva desarrollando desde hace 30 años con mucho éxito en Salamanca y Peñaranda de Bracamonte. Y el lector se encontrará en este nuevo espacio un lugar que desde el principio será suyo. Ya que el lector y la lectura serán los principales protagonistas de todas las actividades que se realizarán en Casa del Lector y que irán desde exposiciones, conferencias, cursos formativos, talleres de creación, ciclos de música, cine y artes escénicas, ilustración y demás manifestaciones artísticas sin olvidar, por supuesto, la investigación y la programación que dedicaremos al público infantil.
-Se suele hablar de grandes escritores; hablemos, si le parece, de algunos grandes lectores. ¿Encontraremos coincidencias?
-A veces coinciden grandes escritores siendo grandes lectores pero otras veces grandes escritores no han sido grandes lectores. Para mí esto es inconcebible, pero todo tiene sus excepciones.
-¿Cuáles serán los rasgos característicos de La Casa del Lector? ¿Qué se propone?
-Casa del Lector se diferenciará del resto de los centros culturales en que todas las actividades se llevarán a cabo bajo una “perspectiva lectora”: leeremos el arte, el cine, la música, la literatura, la ilustración… Etc. Además, nos convertiremos en un centro de debate, análisis e investigación sobre el mundo de la lectura y el futuro al que nos enfrentamos.
"En La Casa del Lector nos convertiremos en un centro de debate, análisis e investigación sobre el mundo de la lectura y el futuro al que nos enfrentamos".
-En un momento de recortes, en especial en materia de cultura, una nueva institución supone una celebración pero también una responsabilidad. ¿Con qué apoyo cuenta La casa del lector?
-Casa del Lector se ha puesto en marcha exclusivamente con la iniciativa privada de Germán Sánchez Ruipérez que ha querido regalar a la ciudad de Madrid un centro cultural de esta envergadura. Han sido 26 millones de euros de inversión privada lo que, con los tiempos que vivimos, es difícil de entender sin conocer la generosidad y la capacidad de Germán de ver la necesidad de un centro cultural de éstas características que culminara el proyecto de su Fundación en estos últimos 30 años. Aunque también tenemos grandes empresas que colaboran con nosotros como el Ayuntamiento de Madrid, que ha cedido el espacio, ONO que se ha convertido en nuestro socio tecnológico y muchas que colaboraran en la realización de actividades como el Ministerio de Cultura o Acción Cultural Española.
-¿Cree usted que el aumento del tipo impositivo en algunos sectores de la cultura entorpecería el desarrollo del mecenazgo?
Sin duda será un lastre más.
-¿Cómo podemos pensar en un modelo moderno y eficaz de mecenazgo?
Dejando que las grandes empresas se desgraven si invierten en Cultura.
- Donde la eternidad envejece (Debate) es el quinto tomo de esta colección de viajes, memorias y ficciones. En él recorre usted lugares y sus desde Melville hasta Otto Dix; de Lorca a Jorge Luis Borges. ¿Por qué esta necesidad de memoria? ¿porqué memoria y ficción?
Porque no hay nada más ficticio que la memoria porque uno al contar algo siempre cuenta lo que le hubiera gustado que pasase y no lo que sucedió realmente.