En menos de tres meses ha desembarcado cerca de una decena de novedades literarias, casi todas ellas en el epígrafe novela: desde Patria (Tusquets) de Fernando Aramburu –de las primeras en salir-; Falcó (Alfaguara), con la que Arturo Pérez- Reverte conquistó incluso a aquellos que lectores que lo adversaban; pasando por las entregas de ficción de escritores como Erri de Lucca o Alessanro Baricco hasta versiones algo más terrenales del superventas como Carlos Ruiz Zafón. La ficción, como de costumbre, va servida.
Hay que destacar una serie de ensayos que resultan especialmente esclarecedores para cerrar un mes –y porqué no, también un año- marcado por el desencuentro
Del otro lado de la balanza hay que destacar una serie de ensayos que resultan especialmente esclarecedores para cerrar un mes –y porqué no, también un año- marcado por el desencuentro y la falta de razones: desde el desconcierto en la elección popular hasta las formas contradictorias –y cada vez menos saludables- de compartir el espacio público y político. De ahí que resulten necesarias algunas de estas páginas, para intentar buscar la razón donde impera la feligresía de los extremos. Despojados incluso de la capacidad de desarrollar compasión o empatía, nos vaciamos en extraños vertederos: desde celebrar la muerte de un joven matador de toros hasta afear el más elemental minuto de silencio que se rinde como civilizado gesto de condolencias.
Sobre ese tema, la desertificación del espacio ciudadano, el filósofo José Luis Pardo propone una reflexión sobre la manera en que la demolición de las instituciones ha llegado hasta las prácticas cotidianas. En su libro Estudios del malestar. Políticas de la autenticidad en las sociedades contemporáneas, con el que se alzó como ganador del 44º Premio Anagrama de Ensayo, el catedrático de filosofía reflexiona sobre las nostalgias ideológicas y los circos del agravio, esa feria donde los populismos hacen su agosto y sacan a pasear a su propia mujer barbuda. ¿Cuáles son los ingredientes de este uso político del malestar? ¿Cuáles son los peligros de una forma de hacer política que parece añorar la acción directa, eludiendo las vías democráticas? ¿Cuál es el papel que debe desempeñar la filosofía ante estos retos? ¿Y la universidad como institución? ¿Y el arte y sus vanguardias?, se pregunta Pardo. En el intento de contestar a estas interrogantes, opone el pensamiento frente al panfleto, la reflexión frente al exabrupto y la reivindicación de una filosofía crítica capaz de cuestionar a la política: eso es lo que propone, una advertencia acerca del malestar en el que vivimos y en su uso como moneda de cambio.
¿Cuáles son los ingredientes de este uso político del malestar? ¿Cuáles son los peligros de una forma de hacer política que parece añorar la acción directa, eludiendo las vías democráticas?
El ensayo de José Luis Pardo se puede leer junto con otros dos libros excepcionales. Uno de ellos Leer es un riesgo (Círculo de Tiza), un volumen que recoge las reflexiones del intelectual italiano Alfonso Berardinelli acerca del acto de la lectura como gesto político y cuya reseña ha aparecido recientemente publicada en la sección de Cultura de este diario; el otro es La hora de clase. Por una erótica de la enseñanza (Anagrama), del psicoanalista italiano Massimo Recalcati. Partiendo de la situación de crisis permanente que experimenta la escuela, y al hilo de su propia biografía escolar, que arranca con el dudoso honor de haber sido el último alumno en Italia suspendido en segundo de primaria, el autor reflexiona sobre el estatuto de la educación en una sociedad que ha vivido el colapso de toda referencia de autoridad. Recalcati propone, frente a un modelo educativo que privilegia la informática, el inglés y las nociones empresariales, una escuela que propicie “el erotismo del saber”, un lugar de resistencia en el que es decisiva la figura del maestro capaz de influir en los alumnos a través de la palabra y la vivencia.
"Todas las construcciones culturales, religiosas, filosóficas, políticas y científicas saltaron por los aires varias veces durante el siglo XX"
La idea de fondo que conecta estos libros es la confección de una forma de pensar, un prisma desde dónde analizar y dar sentido a las cosas. En Tratado de filosofía zoom (Ariel), el nuevo libro del filósofo José Antonio Marina, el pedagogo plantea un sistema filosófico que va de lo sencillo a lo más complejo, a las verdades sistemáticas. Lo más interesante de este libro radica en el punto de partida, esa idea de que hemos asistido a una demolición sobre la que toca levantar un nuevo edificio de pensamiento: "Todas las construcciones culturales, religiosas, filosóficas, políticas y científicas saltaron por los aires varias veces durante el siglo XX, tan innovador y tan sangriento. Los análisis anteriores han mostrado la índole trágica de nuestra situación, la necesidad de fundar nuestra convivencia en algo que nos permita construir un mundo habitable, y la inevitabilidad de que sea una ficción. El siglo XX nos legó el escepticismo de la lucidez. Descubrió que vivíamos en un mundo de simulacros y legitimidades fraudulentas".
Mucho más rompedor e interesante que el libro de Frankopan es la próxima publicación de Los enemigos del comercio, de Antonio Escohotado.
También con una perspectiva de revisión y reformulación de los paradigmas, destaca el ensayo El corazón que ha movido la historia del mundo (Crítica),un ensayo en el que el investigador de Oxford Peter Frankopan propone una nueva interpretación del pasado a partir de orden histórico y geográfico, dice él, menos eurocéntrico. Publicado en inglés con el título The Silk Roads (en español La ruta de la seda) . El ensayo plantea un recorrido histórico enfocado desde la perspectiva del mundo mediterráneo en su confluencia con el mundo árabe y asiático. Y si existe un elemento novedoso, y provocador, que la mayoría de la crítica ha señalado en este ensayo, tiene justamente que ver con el cambio de perspectiva al momento de cuestionar las ideas tradicionales de la historiografía tradicional. Sin embargo, mucho más rompedor e interesante que el libro de Frankopan es la próxima publicación de Los enemigos del comercio, el tercer y último volumen de la serie que ha dedicado Antonio Escohotado a la historia moral de la propiedad. En esta entrega, el escritor y filósofo recorre un siglo completo desde el alzamiento bolchevique hasta la actualidad, una lectura que demuestra hasta qué punto el colapso de las iniciativas dirigidas a trascender el comercio han generado procesos de crisis en sociedades hiperveloces y de una afluencia incontrolada.